miércoles, mayo 15, 2024

CONCATENACIONES: EL gobierno de México, exhibido internacionalmente

Fernando Irala
Gran molestia ha expresado el Presidente de México por el Informe sobre derechos humanos que el Departamento de Estado norteamericano entregó al Congreso de su país.
Su molestia es explicable: en el informe, presentado anualmente por mandato de sus leyes, la dependencia del gobierno estadounidense resume la terrible situación que se vive en México en la materia, y encuentra una grave responsabilidad en la pasividad y negligencia del gobierno mexicano.
El resumen, que a continuación citamos textualmente, es contundente:
“No hubo cambios significativos en la situación de los derechos humanos en México durante el año.
“Entre las cuestiones importantes de derechos humanos figuraban informes creíbles de: ejecuciones ilegales o arbitrarias, incluidas ejecuciones extrajudiciales; desaparición forzada; torturas o tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes por parte de las fuerzas de seguridad; condiciones penitenciarias duras y potencialmente mortales; arresto o detención arbitrarios; graves problemas con la independencia del poder judicial; graves restricciones a la libertad de expresión y la libertad de prensa, incluida la violencia contra periodistas y la aplicación o amenaza de hacer cumplir leyes penales sobre difamación para limitar la expresión; grave corrupción gubernamental; violencia generalizada de género, incluida la violencia doméstica o de pareja, la violencia sexual, la violencia en el lugar de trabajo, el matrimonio infantil, precoz y forzado, el feminicidio y otras formas de violencia de este tipo; delitos que involucran violencia o amenazas de violencia contra personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer o intersexuales; delitos que impliquen violencia o amenazas de violencia contra personas con discapacidad; y restricciones significativas o sistemáticas a la libertad de asociación de los trabajadores, incluidos delitos de violencia e intimidación contra los trabajadores.”
El texto continúa, pero nos falta espacio. Sin embargo, las líneas anteriores son suficientes para hacer notar lo evidente.
De ahí la molestia y la desazón que se ha hecho sentir públicamente en Palacio Nacional. Aquí en cambio la señora Piedra ha propuesto cerrar la oficina de Derechos Humanos. También tiene razón, el informe de nuestros vecinos muestra que no sirve para nada.

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