ESTADOS UNIDOS.- Además del próximo presidente, los estadounidenses votan este martes para renovar la Cámara de Representantes y una tercera parte de los escaños del Senado.
En estos comicios los demócratas esperan arrebatarle la mayoría a los republicanos, el partido en el poder. La elección a senadores es prácticamente tan importante como las presidenciales ya que la cámara alta tiene un peso especial de decisión y fiscalización de las acciones del mandatario.
La Cámara Alta estadounidense promulga leyes, controla el gasto público y tiene la potestad de enjuiciar a funcionarios del Gobierno y aprobar nombramientos como jueces y tratados.
El Senado estadounidense está compuesto por 100 escaños, dos por cada estado y son elegidos de forma directa por un periodo de seis años. Cada dos se renueva un tercio (33).
Este martes se renuevan 35 más un tercio de la Cámara. A estos hay que sumar dos senadores suplementarios tras la muerte de John McCain y la renuncia por problemas de salud de Johnny Isakson, ambos republicanos.
Actualmente los republicanos tienen la mayoría con 53 senadores, los demócratas tienen 45 y hay 2 independientes.
12 de los escaños que están en juego este 3 de noviembre son demócratas y tendrían que ganar al menos cuatro más para obtener la mayoría. Según las encuestas, hay varios estados donde podrían lograrlo.
Los focos estarán especialmente puestos en Carolina del Sur, donde Lindsey Graham, muy cercano a Trump y presidente de la comisión judicial, se mide con Jamie Harrison. Este último consiguió un presupuesto récord para su campaña: 57 millones de dólares.
AM.MX/iv (RFI)
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