lunes, mayo 20, 2024

LA COSTUMBRE DEL PODER: El poder en su laberinto de cristal II/V

Gregorio Ortega Molina

*La ejecución no aclarada de Luis Donaldo Colosio en su XXV aniversario este 2019

Esa constante que es el tiempo, lo mismo arroja una tenue que espesa capa de polvo sobre decisiones o sinrazones determinantes en la historia; así favorece un vendaval de inquietudes humanas que, más pronto que tarde, saca a la luz lo que verdaderamente motivó al que oficia el mando político.

     El poder dista mucho de ser florero. Es objeto de culto para quien lo ejerce, lo mismo que para quien lo padece. Lesionarlo es lesionarse. Y como refiere Solana Olivares en Este laberinto de cristal en su reflexión en torno al efecto mariposa: las consecuencias del aleteo pueden ser inmediatas, lo que sucede sólo en contadas ocasiones, o se manifiestan años después. En el caso de la ejecución de Luis Donaldo Colosio apenas inicia su develación, pero en el suceso de apenas ayer, la lesión que AMLO causó a la legitimidad por él recibida el 1° de julio último, manifiesta la aparición de un conflicto que durará su tiempo constitucional o más, si es que se anima a la reforma para permanecer.

     Pero regresemos a la respuesta que Salinas de Gortari dio hace 25 años a Fernando Solana: “… Porque puede haber cambios en el terreno económico, político o social, que por cierto nunca están disociados, separados unos de otros. Pero lo importante es el cambio en las actitudes, en la forma de pensar y de ser. Y a mí me parece que este cambio de mentalidades representa la transformación más importante que ha vivido el país y muestra la existencia de una nueva generación, que no depende de la edad sino de la actitud. Esta es una nueva actitud social, una nueva forma de relacionarnos entre los mexicanos, y a ella tiene que responder el gobierno para servirlos mejor. Eso es precisamente lo que nosotros hemos buscado hacer”.

     Por nada en tiempo y sucesos casi acierta Salinas de Gortari en su respuesta. Olvidó lo que le preguntaron y se olvidó de él mismo al aferrarse al poder y a su proyecto. Ofició su sucesión consciente de que ésta se vería ensombrecida por el espíritu de Houston y la firma del TLC, pero sobre ese evento que fue su sueño de poder, se encimó la irrupción del EZLN con las proclamas del Sub Marcos, lo que obligó a la posposición de los festejos. Destruyó él mismo su lugar en la historia.

     Ensimismado en los anuncios de su fracaso -que apenas se consolida-, imponerle silencio sobre la ejecución de Luis Donaldo Colosio fue fácil; las consecuencias adquieren carta de naturalización y fuerza con la llegada al poder del Movimiento de Regeneración Nacional. Al matar al candidato del PRI cancelaron el ingreso de México al Primer Mundo.

     Mañana, lo que Carlos Salinas supo, o anticipó, o presintió, pero se negó a aceptar.

www.gregorioortega.blog   @OrtegaGregorio

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