Roberto Vizcaíno
No encuentran cómo pararla, evitar que encabece la marea rosa que llenará al tope el Zócalo y sus alrededores el domingo 19, dónde Xóchitl Gálvez será oradora única en defensa del voto y la democracia para demostrar que cientos de miles, millones de mexicanos la respaldan.
Demostrar con este hecho que ella encabeza ya la mayor base social que pueda tener una aspirante presidencial en México en estos momentos. Que quizá ya igualó en arrastre popular, en apoyos ciudadanos a AMLO.
Una enorme concentración civica que será reforzada con otras que ese mismo día y hora se realizarán en al menos unas 70 ciudades del país, y en Estados Unidos y Europa.
Una imagen, videos que le darán la vuelta a México y al mundo de una candidata presidencial de oposición que podría con ello estar anunciando su victoria anticipada para el 2 de junio.
Un acto que pondrá contra la pared a Andrés Manuel López Obrador y a su candidata Claudia Sheinbaum, y a su Movimiento de la 4T para obligarlos a intentar realizar en apenas unos cuantos días algo muy superior -que no se ve que puedan hacer- para contrarrestar la percepción de que Xóchitl ya les arrebató su base social y que ya les ganó.
Es por ello que han movilizado a todos sus moneros y columnistas, “periodistas mañaneros”, sus medios maiceados quienes junto a Mario Delgado y otros -como el esquirolazo de MC Jorge Álvarez Máynez-, que han anunciado que hasta interpondrán quejas y recursos para que INE y Tribunal Electoral califiquen la concentración de la ola rosa del domingo 19 en el Zócalo de la CDMX como un acto de gastos de campaña de la opositora presidencial de PRI, PAN y PRD.
Les cayó pésimo, se les atragantó, el anuncio de la asistencia y participación de Xóchitl quien acudirá junto a Santiago Taboada -candidato a la Jefatura de la CDMX-, para luego de ahí irse al tercer y último debate con Claudia Sheinbaum a Tlatelolco.
En los hechos será un gran-gran-gran cierre de campaña para la hidalguense quien luego tendrá apenas semana y tres días para darle una última vuelta a los estados más importantes y de los que dependerá realmente el flujo de votos para obtener el triunfo.
Nadie duda de que Xóchitl ganará el tercer debate. Que tundirá con todo a Claudia Sheinbaum.
Todos sabemos que ese debate es el round final de esta contienda. Y que para Xóchitl Gálvez es el ahora o nunca más.
En fin, es esa deseada y única, providencial oportunidad de demostrarle a México y el mundo que ella es lo mejor que le pudo pasar a México para rescatar al país del desastre que representa ya la administración del Atila de Macuspana.
Una oportunidad excepcional de un debate luego de encabezar una concentración de cientos de miles de ciudadanos no acarreados que atiborrarán la Plaza de la Constitución que Andrés Manuel López Obrador consideraba de su exclusiva propiedad.
Esta nueva marea rosa con Xóchitl a la cabeza ratificará que AMLO, Sheinbaum y Morena ya perdieron no sólo el Zócalo sino el apoyo y credibilidad de grandes segmentos de la población.
Lo que consideramos como la “base social” que requiere un gobernante para poder avanzar.
Por eso los trae aterrados, desesperados. Ya se las arrebató Xóchitl.
XINGONA DE IVONNE MELGAR, UN LIBRO INELUDIBLE
En periodismo no hay nada más invaluable que la oportunidad. No hay nada más importante para un periodista que coincidir con un hecho.
Eso le ocurrió a nuestra querida amiga la reportera Ivonne Melgar. Su oportunidad periodística se dio justo en esta campaña presidencial de 2024 con el sorpresivo y providencial lanzamiento ciudadano de Xóchitl Gálvez a quien Ivonne había seguido periodísticamente durante años, para llegar a ser quien más conoce a la hidalguense en este medio.
Esta oportunidad no podría ser sin coincidir además con la edad y madurez, formidable experiencia y capacidad intelectual de la propia Ivonne. Julio Sherer el enorme periodista, mi jefe en Excélsior y Proceso, me decía en estos casos que todo dependía de la “neurona”, es decir de la capacidad y madurez intelectual y profesional de alguien.
Todo coincidió providencialmente en ella para darnos este libro que con el título de Xingona nos adentra en lo que es, de dónde viene y que promete Xóchitl Gálvez para bien de México, su democracia y desarrollo en todos los sentidos.
Esta tarde, a las 18 horas, lo presentará en el Teatro Ana María Hernández -Pacifico 181- del barrio de La Conchita en Coyoacán con Kenia López Rabadán, Federico Reyes Heroles y Patricia Olamendi como comentaristas y moderadores.
No se si usted lo siga pensando, dudando, pero yo estoy convencido de que Xóchitl va a superar todas las trapacerías y malas mañas de AMLO y será la ganadora del 2 de junio. Así que más vale que conozca quien es esta hidalguense y la mejor forma es leyendo a Ivonne en Xingona.
¡AGARRON ELECTORAL! EN LA PERMANENTE
¡Vaya reto el de la tlaxcalteca Ana Lilia Rivera! Eso es en estos momentos tener que conducir las sesiones de la Comisión Permanente donde convergen diputados y senadores de todas las fracciones que interactúan en el Congreso de la Unión.
Una verdadera olla de grillos, un palenque peor que el de cualquier pueblo de aguerridos galleros, justo a días de las presidenciales más competidas y la más grande elección de la historia de México.
Para los integrantes de esta arena política no existe otro mejor momento que este. Subir a tribuna, apoderarse del micrófono les garantiza un boleto directo para medirse con los más reconocidos en el debate parlamentario.
Ayer por este trance pasaron el expoderoso senador de Morena, Gabriel García quien hace un par de años cayó de la Gracia del Señor y no ha podido recuperase de ese golpazo; le siguió en ese turno el panista veracruzano Julen Rementería y luego Ruth A. López de MC y después Graciela Gaitán del Verde para dar paso a la enorme talla y experiencia que representa la priísta Beatriz Paredes.
Todos ellos insistieron en que sus fuerzas políticas son las que representan la salvación de México.
El turno le tocó luego al senador del Grupo Plural Emilio Álvarez Icaza quien después fue opacado por las sandeces del diputado del PT, Gerardo Fernández Noroña, a quien sustituyeron en el micrófono senatorial la diputada Lilia Olvera, del PAN, Edgardo Palacios, Cristina Ruíz del PRI y Lilia Aguilar, del PT.
Todos ellos en una cadena de quejas y promesas que ya pocos les creen.
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