CIUDAD DE MÉXICO.- En el contexto del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, a conmemorarse este 10 de septiembre, la organización Voz Pro Salud Mental CDMX (VPSM CDMX) llama a autoridades y sociedad en general a promover en mayor medida la concientización de esta problemática, debido a que la pandemia por COVID-19 ha provocado un escenario catastrófico a nivel mundial, aumentando los riesgos en la salud mental de la gente, dejando un saldo de mayor depresión, aumento de angustia y ansiedad, trastornos de pánico o disfunción nerviosa por situaciones estresantes.
De acuerdo con el Dr. Guilherme Borges, investigador del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz (INPRF), en la estadística de suicidios de junio de 2020 a junio de 2021, en la Ciudad de México se registró un aumento de suicidios de 1.7% en hombres y mujeres mayores de edad, derivado, tal vez, de los problemas económicos y desempleo, entre otros factores, explicó el especialista.
No obstante, la Dra. Shoshana Berenzon, también del INPRF, comentó que realmente no se sabe cómo afectará la pandemia en la conducta suicida, pero “lo que sabemos hasta ahora, es que se han dado cambios en la conducta de los familiares y pacientes en la CDMX, aunque en otros países no se han visto afectados”, agregó.
Para VPSM CDMX, las personas que cometen suicidio posiblemente enfrentaron situaciones de violencia doméstica, alcoholismo, drogadicción, enfermedades mentales sin un diagnóstico, problemas financieros, aislamiento social, desesperanza, o por la pérdida de algún ser querido y que experimentan soledad.
Según reportes de la Organización Mundial de la Salud OMS, en el mundo cada año se suicidan 800 mil personas, y por cada una de ellas se cometen 20 intentos fallidos. Asimismo, los efectos al interior de la familia y su núcleo social son de gran impacto emocional, generando un complejo de culpa y de impotencia por considerar que se pudo haber evitado.
En México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) hasta 2017, la tasa de suicidio es de 5.2 por cada 100 mil habitantes y es la quinta causa de muerte en menores de 15 años, tasa que ha aumentado en un 976% en los últimos 37 años.
Los universitarios también son una población susceptible a la ideación suicida. Al respecto la Dra. Corina Benjet, de la Dirección de Investigaciones Epidemiológicas y Psicosociales del INPRF, dio las siguientes cifras: aumento del 3% en los jóvenes de condición médica vulnerable (con padecimientos como la diabetes), incremento en 2% en estudiantes con condiciones normales pero con problemas de manejo del estrés y con incapacidad de resolución de problemas, por otra parte el grupo de mayor índice de ideación suicida se registra en aquellos jóvenes que padecen algún trastorno mental y falta de manejo de situaciones adversas.
Lo anterior constata que no solo los adultos son susceptibles a cometer estos actos suicidas. En ese sentido, Voz Pro Salud Mental Ciudad de México recomienda atender las dinámicas familiares y sociales para observar la conducta de las niñas, niños y jóvenes, así como de las personas cercanas. Una manera importante de prevenir es la escucha activa y la empatía. Cuando se detecta una idea suicida, lo mejor será abrir el tema, identificar por qué esa persona tendría motivos para atentar contra su vida, conocer sus motivos de desesperación o desesperanza e identificar las maneras en que idearía o planearía el suicidio y acompañarle en el proceso para pedir ayuda profesional.
Además, es importante tener la responsabilidad de mantener una rutina saludable, ejercitarse, comer sano y estrechar los lazos personales con el núcleo social, así como procurar hacer actividades recreativas que llenen de satisfacción y trabajar las pérdidas de aquellas personas con las que se tuvo un lazo sentimental. Es muy importante buscar ayuda emocional en los sistemas especializados.
AM.MX/fm
