José Antonio Aspiros Villagómez
Durante la infancia de este tecleador, no existían la televisión ni todos los demás inventos posteriores destinados al entretenimiento y un poco a la cultura. Más tarde, a la información.
De manera que a fuerza de oír la radio todos los días desde el programa ‘La legión de los madrugadores’ hasta las aventuras de Carlos Lacroix, fue posible escuchar la música de entonces y aprender y entonar -aún las recordamos- las letras de numerosas canciones.
Para los niños estaba solamente Cri-Cri, y para los demás, aquellos populares intérpretes sin par como Alfonso Ortiz Tirado, Pedro Vargas, Agustín Lara y muchos más, entre ellos el popularísimo actor de cine Pedro Infante.
Quien, por cierto, cuando cantaba ‘Pénjamo’ había que apagar el gigantesco receptor RCA Víctor porque al abuelo no le gustaba ese corrido. Su canción favorita -no de Pedro- era ‘Contigo’, interpretada por un trío que nació el mismo año que el tecleador: Los Panchos.
Ahora que están por cumplirse cien años del natalicio de quien primero fue carpintero en su natal Guamúchil, Sinaloa, es pertinente compartir con los lectores la siguiente información -texto y fotos-, enviada por la estimada Martha Montero, nieta de quien fue nuestro maestro de fotografía en la Escuela de Periodismo ‘Carlos Septién García´. Es el siguiente:
Queridos todos:
Custodiar el legado fotográfico de Tomás Montero Torres siempre nos depara sorpresas y grandes experiencias. El próximo 18 de noviembre se conmemora el centenario del natalicio del gran ídolo de México, Pedro Infante.
Las canciones que grabó en estudio, con excepción de una, tuvieron el sello de los estudios Peerless, que hoy son Warner Music. Pues bien, para las ediciones de aniversario (un CD sencillo y un paquete maravilloso de 5 CD con sus 100 mejores canciones), lo mismo que para la edición de un documental entrañable, eligieron las imágenes de un fotorreportaje que Tomás Montero Torres le hizo justo en una grabación en ese legendario estudio y donde Pedro sale de lo más natural: descalzo, haciendo apuntes en las partituras de los músicos, tocando la guitarra, escuchando las pruebas…
Este martes 7 de noviembre fue la presentación a medios, en las instalaciones de la Sociedad de Autores y Compositores de Música. Además de proyectar el documental completo (que se incluye en ambas versiones de CD), se contó con la presencia de los hijos de Lola Beltrán, José Alfredo Jiménez, Consuelito Velázquez, Manuel Esperón, Chava Flores, Ferrusquilla, Alberto Cervantes…
De las cosas que se contaron, resalta que, a la fecha, una canción interpretada por este gran ídolo, cantante y actor, sigue siendo la de mayor ventas en México: Las Mañanitas. De igual forma, que en un momento de su carrera sacó al mercado, al mismo tiempo, ¡54 discos, todos con grandes ventas!, y llegó a interpretar siete géneros diferentes, desde canciones para niños, huapangos, corridos, boleros, rancheras y valses, entre otros.
En el documental hay varios testimoniales de Pedro que Warner Music rescató y que hablan mucho de ese don de gentes con que se le sigue reconociendo.
Por cierto, en el boletín que entregaron venía la lista de las 100 canciones y dos de las nietas de Montero, hijas y sobrinas de bohemios de hueso colorado, sólo decían “esta me la sé, esta me la sé, esta me la sé…” y así con casi todas. ¡Un ADN muy romántico que traen las dos! La canción que le da título a este homenaje, autoría de Rubén Fuentes y Alberto Cervantes, casi mandada a hacer para este motivo: Cien años.
Emoción grande al ver las fotos en los CD, ¡en verdad se ven increíbles!
Saludos cordiales
Martha Patricia Montero
Directora General
Archivo Tomás Montero Torres
En efecto, Pedro cantó ‘Cien años’, una canción de amor no correspondido –“pasaste a mi lado con gran indiferencia”- pero que, no obstante, “si vivo cien años, cien años pienso en ti”.
