El exfuncionario apareció “pálido y un poco desaliñado, apareciendo con una sudadera gris y pantalones caqui”. Su esposa y dos hijos estuvieron presentes
De ingeniero mecánico a “oreja profesional” del CISEN. Superó en sus prácticas corruptas al mismo “Negro” Durazo. Al menos durante dos sexenios protegió al Cártel de Sinaloa