viernes, abril 19, 2024

Morenistas de Quintana Roo buscan beneficios personales y de grupo en Solidaridad

PLAYA DEL CARMEN, QUINTANA ROO, 12 de noviembre (AlmomentoMX).- Los delegados estatales del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Rafael Marín Mollinedo y Arturo Abreu Marín, coordinador de programas sociales del gobierno federal entrante para Quintana Roo, extienden sus tentáculos en el municipio de Solidaridad para obtener beneficios personales y de grupo.
De acuerdo con una investigación del Sol de Quintana Roo, los dos políticos tienen la encomienda de privilegiar al grupo político-empresarial de tabasqueños, tengan residencia o no en Quintana Roo, con el compromiso de capitalizar su tierra natal, Tabasco, para darle el esplendor que algún día tuvieron pero que se llevaron los saqueadores gobiernos neoliberales de Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa, y que remató el actual mandatario Enrique Peña Nieto con la reforma energética.
Es por ello que hoy vemos a Nicolás Mollinedo Bastar, mejor conocido como “Nico”, esposo de Lydia Portilla Mánica hermana del actual director general de Planeación de Tulum, Jorge Portilla Mánica, Jorge Portilla Mánica.
A este último se le ve muy activo en el municipio de Tulum, pero no en su cargo como funcionario municipal sino en la gestión de trámites estatales para la puesta en marcha de desarrollos inmobiliarios que construirán sobre tierras de su propiedad.
Otros tabasqueños que andan muy entusiasmados son los que están dedicados a los medios de comunicación, ellos son Carlos Canabal Ruiz, propietario del periódico La Verdad de Quintana Roo, y empresario dedicado al procesamiento de basura en Cancún; y José Alberto Gómez Álvarez dueño del matutino “Quequi” y promotor de peleas de box en Quintana Roo.
Sin embargo, caso especial merecen los amigos de Rafael Marín Mollinedo, delegado estatal en Quintana Roo de Morena, quien es dueño de la empresa Tabana Banana SA de CV, dedicada a surtir a supermercados y hoteles en Cancún y la Riviera Maya, especialmente bananas y papayas.
Para no perder el toque de sus amistades, Rafael Mollinedo Marín impuso a dos restauranteros en cargos relevantes dentro del Ayuntamiento. Estos personajes muy cercanos a él y a su primo Arturo Abreu Marín son Fernando Vargas Aguilera, como tesorero; y a Auric Arturo Oliver como titular de la Dirección General de Servicios Públicos Municipales, puestos estratégicos para la obtención de recursos.
Y si bien estos últimos no son tabasqueños de origen, ellos son cancunenses que tienen la instrucción de atender principalmente a los empresarios y políticos tabasqueños, en concordancia con la estrategia de capitalizar el estado de Tabasco.
En la Tesorería del municipio de Solidaridad está Luis Fernando Vargas Aguilar, procedente de Cancún, hijo del polémico empresario y dueño del restaurante Crab House de Cancún, con quien Rafael Marín Mollinedo ha entablado no sólo una amistad entrañable, sino que también han hecho sociedad en algunos negocios a través de sus empresas dedicadas a los alimentos, pero ahora se han incursionado como socios en la función pública y la política.
También en la Dirección General de Servicios Públicos Municipales de Solidaridad está Auric Arturo Oliver, otro empresario dedicado a la industria restaurantera. Este personaje fue director general de Grupo Sano Juicio, denunciado en 2014 por intentar despojar a la empresaria Ana Caralina Tamayo duela de Construcciones Plaza Kokai SA de CV, según obra en el expediente 1393/2014 radicado en Cancún ante el Juez Tercero Civil de Primera Instancia.
Aunque estarán prohibidos los diezmos en las licitaciones, Auric Arturo Oliver tiene la encomienda de privilegiar a los empresarios constructores de Tabasco en las convocatorias para realizar obra pública en el municipio más pujante de Quintana Roo.
También cabe señalar que Auric Arturo Oliver es dueño de la marca el Sano Juicio Restaurante -especializado en comida internacional contemporánea y platillos de fusión-, que cuenta con tres sucursales en Cancún, pero tiene previsto abrirse paso hacia Playa del Carmen, Puerto Morelos y Tulum.
Auric Arturo Oliver es originario de la Ciudad de México, trabajó durante 12 años en Grupo Anderson’s, ícono de la industria gastronómica en México, pero ahora se tendrá que especializar en la obra pública del municipio de Solidaridad.
Tanto Fernando Vargas Aguilar como Auric Arturo Oliver han sido clientes y socios de Rafael Mollinedo Marín en la industria restaurantera, pues por medio de su empresa Tabana Banana SA de CV, les surtía alimentos a sus negocios, es por ello que ahora se pretenden encumbrar en la función pública como fuente de riqueza.
A Rafael Mollinedo Marín se le da más el buen comer y disfrutar dela vida que la política, pues es considerado entre los integrantes de Morena como un Junior, pues gusta de viajar y divertirse a lo grande pese a los compromisos republicanos de jefe López Obrador.
Incluso, en muchos de los eventos que definieron el rumbo de los morenistas en Quintana Roo nunca estuvo presente pues se sabía que él prefería disfrutar de buenas comidas, largos paseos y reuniones con sus amigos y familia.
De hecho, la llegada de su primo Arturo Abreu Martín a la coordinador de programas sociales para Quintana Roo no es fortuita, es en realidad un ancla para impedir que Rafael Marín Mollinedo haga negocios por su cuenta a nombre del gobierno federal, pues es también una de sus pasiones en el engrosas sus cuentas bancarias, que por ciento ninguno ha realizado sus declaraciones patrimoniales ni mucho menos de intereses.
En el pasado, como funcionario del gobierno capitalino, Rafael Marín Mollinedo presentó su renuncia a la dirección general de Servicios Urbanos del Gobierno del Distrito Federal en medio de las sospechas sobre presuntas irregularidades durante su gestión.
El argumento Marín Mollinedo fue que dejó el cargo con el propósito de realizar actividades de proselitismo en Cancún, Quintana Roo, pero denuncias periodísticas, afirman que utilizó recursos públicos para reparar y rehabilitar camiones de desecho del organismo de transporte público RTP, que fueron a parar al municipio de Macuspana, Tabasco, cuyo alcalde es nada menos que José Ramiro López Obrador.
Por último, Arturo Abreu Marín primo de Rafael Mollinedo Marín, Abreu Marín nació en Balancán, Tabasco, una tierra azotada por la pobreza y la marginación. En la época de Luis Echeverría y la “guerra sucia” contra los disidentes de la izquierda mexicana, Abreu Marín trabajaba en la subdelegación de Gobierno de la Delegación Milpa Alta, en el entonces Distrito Federal, y fue testigo de cómo el profesor Carlos Hank González transformó la ciudad.
El Sol de Quintana Roo, señala que en la época de José López Portillo, fue delegado del entonces brazo social de la presidencia: Banobras, pieza clave en el presidencialismo mexicano. Así de 1975 a 1989 fungió como un funcionario de la institución en los estados de Chiapas, Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Tabasco, Chiapas y Veracruz. El sureste rebelde mexicano lo conoció como ninguno y en cierta medida, le tocó atestiguar el nacimiento de otra izquierda: el EZLN.
Durante la presidencia de la República de Miguel de la Madrid, el tabasqueño fue pieza clave de Banobras, particularmente en Tabasco, puesto que alternó con la gerencia regional y de la zona del sureste de la otra “caja chica” del Estado: Nacional Financiera.
Su desempeño lo hizo ser cercano a personajes oscuros de la política mexicana como Manuel Bartlett y Ernesto Zedillo pues al ser contralor en la Secretaría de Educación en Tabasco de 1992 a 1994, el contacto con los poderosos secretarios de Estado era frecuente.
La trayectoria política de Abreu Marín no se puede despegar de su natal Tabasco, ni tampoco de personajes priistas tabasqueños de alcance nacional, de los que fue colaborador fiel: los gobernadores Salvador Neme Castillo, Manuel Gurría Ordoñez y Roberto Madrazo Pintado. En cada uno de sus gobiernos don Arturo encontró trabajo, cobijo y amistades.
En el año 2000, el tabasqueño se sumó a la campaña a la presidencia de la República de Cuauhtémoc Cárdenas, mismo que fue derrotado por Carlos Salinas de Gortari. Luego de la escena trágica del fraude electoral en México, Arturo Abreu encontró cobijo en el gobierno de la Ciudad de México, su paisano, Andrés Manuel López Obrador lo hizo director de recursos humanos en el Capce.
También posee experiencia en la Comisión Nacional de Energía Nuclear en México, D.F., y en el Fondo de Planeación de la Industria Azucarera (México, D.F.). En dos ocasiones formó parte de la Asociación de Banqueros De México como presidente del Centro Bancario de Tabasco.
Arturo Abreu Martín será el coordinador de programas sociales federales para Quintana Roo, uno de los cargos más sensibles para el estado, mismo que servirá para apuntalarse él u otro de sus elegidos a la gubernatura para Quintana Roo.

¡A ENRIQUECERSE!

Rafael Marín Mollinedo, delegado estatal en Quintana Roo del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena); Arturo Abreu Martín, coordinador de programas sociales para Quintana Roo, y Nicolás Mollinedo Bastar y ex chofer de Andrés Manuel López Obrador, conforman un clan que han amasado millonarias fortunas al amparo del poder que opera con la izquierda pero que cobra con la derecha.
A lo largo de su trayectoria, los tres personajes con estrechos lazos consanguíneos, han tenido cargos públicos con los gobiernos en turno tanto a nivel nacional como estatal y municipal, así como la obtención de contratos millonarios por la asignación directa en la prestación de servicios en administraciones priistas y panistas.
También les persigue la fama de su gusto por ganar bien, pues se han visto envueltos en escándalos de que han obtenido salarios muy por encima de sus superiores o los autorizados en los reglamentos de la administración pública capitalina y federal.
Los que más arraigo tienen en Quintana Roo son Rafael Marín Mollinedo, empresario dedicado a la compra y venta de frutas y legumbres para abastecer los principales hoteles y empresas del estado, así como en algún tiempo vender los alimentos a la cárcel municipal de Cancún; su primo, Nicolás Mollinedo Bastar, mejor conocido como “Nico”, es esposo de Lydia Portilla Mánica hermana del extitular de Sintra, Jorge Portilla Mánica, además de que fue un estrecho colaborador de la administración municipal de Gregorio Sánchez Martínez, cuando este fue presidente municipal de Benito Juárez.
Y Arturo Abreu Martín, primo de Rafael Marín Mollinedo ha tenido contacto con el estado por intereses inmobiliarios y políticos que empresariales.
Rafael Marín Mollinedo, delegado estatal en Quintana Roo de Morena es dueño de la empresa Tabana Banana SA de CV, dedicada a surtir a los principales supermercados y hoteles en Cancún y la Riviera Maya, principalmente bananas y papayas.
Sin embargo, en septiembre de 2008, en el municipio de Benito Juárez, Quintana Roo, le otorgó la concesión a la empresa Tabana Banana de los alimentos de la cárcel del municipio: Los accionistas de la firma son Rafael Fernando Marín Mollinedo y María Amada Mollinedo Valencia, y el comisario del Consejo de Vigilancia es nada menos que su primo Nicolás Mollinedo Bastar. En aquel entonces obtuvieron por servicio de tres años más de 50 millones de pesos, pues cada año les dejaba ganancias por 17 millones de pesos.
La adjudicación por el servicio de abastecimiento de los pésimos alimentos de los presos de Cancún fue directa y autorizada por el entonces presidente municipal, Gregorio Sánchez Martínez, quien posteriormente fue a dar a la cárcel y exculpado más tarde.

MARÍN MOLLINEDO, TODO UN JUNIOR

Pese a que se encuentra en el umbral de ser un adulto mayor, Rafael Marín Mollinedo es considerado entre los integrantes de Morena como un Junior, pues gusta de viajar y divertirse a lo grande pese a los compromisos republicanos de jefe López Obrador.
Incluso, en muchos de los eventos que definieron el rumbo de los morenistas en Quintana Roo nunca estuvo presente pues se sabía que él prefería disfrutar de sus largos paseos y reuniones con sus amigos y familia.
De hecho, la llegada de su primo Arturo Abreu Martín a la coordinador de programas sociales para Quintana Roo no es fortuita, es en realidad un ancla para impedir que Rafael Marín Mollinedo haga negocios por su cuenta a nombre del gobierno federal, pues es también una de sus pasiones en el engrosas sus cuentas bancarias, que por ciento ninguno ha realizado sus declaraciones patrimoniales ni mucho menos de intereses.
En el pasado, como funcionario del gobierno capitalino, Rafael Marín Mollinedo presentó su renuncia a la dirección general de Servicios Urbanos del Gobierno del Distrito Federal en medio de las sospechas sobre presuntas irregularidades durante su gestión.
El argumento Marín Mollinedo fue que dejó el cargo con el propósito de realizar actividades de proselitismo en Cancún, Quintana Roo, pero denuncias periodísticas, afirman que utilizó recursos públicos para reparar y rehabilitar camiones de desecho del organismo de transporte público RTP, que fueron a parar al municipio de Macuspana, Tabasco, cuyo alcalde es nada menos que José Ramiro López Obrador.

“NICO” CON UNA VIDA DE LUJO

El primo carnal, Nicolás Mollinedo Bastar, ex chofer de López Obrador es mejor conocido como “Nico”, también es esposo de Lydia Portilla Mánica hermana del extitular de Sintra, Jorge Portilla Mánica, además de que fue un estrecho colaborador de la administración municipal de Gregorio Sánchez Martínez.
En los últimos años, El Nico se ha dado una vida llena de lujos con la adquisición de diversos inmuebles, que le ha permitido colocar a sus hijos en colegios de Estados Unidos, y por supuesto, financiaba vacaciones que se extendían por meses en el extranjero.
“Nico” fue director de Organización y Servicios y coordinador de la Unidad de Apoyo Logístico de la Jefatura de Gobierno, lo que le ayudó a hacerse dueño de casas en la Ciudad y en el Estado de México. Adquirió un lujoso Mercedes Benz y de una quinta en Tabasco, todo esto con el mismo sueldo que un subsecretario, 62 mil 997 pesos mensuales.
Por ejemplo, el hijo mayor de El Nico, Nicolás Mollinedo Portilla, asistió en 2006 a Culver, el lujoso colegio privado de Indiana, cuya colegiatura rondaba los 30 mil dólares anuales, más mil 500 dólares de uniformes, 750 dólares del curso de inglés obligatorio para estudiantes extranjeros y mil dólares para un seguro médico y gastos de manutención. En total, $33 mil 450 dólares anuales, lo que equivalía a unos $374 mil pesos al tipo de cambio de aquel momento.
Otro caso similar se dio en 2017 cuando otro de sus hijos, Samuel Mollinedo Portilla, quien llevó a sus amigas a la final del Super Bowl 51, en donde el costo del boleto más barato superaba los tres mil 600 dólares. Samuel suele viajar en yates privados con sus amigos por lo menos desde agosto de 2012, hospedarse en resort en la costa mediterránea, en donde los precios oscilan por noche de los 330 a los 440 euros por persona.

ARTURO ABREU, INVOLUCRADO CON “POLITICOS OSCUROS”

La historia y las riquezas de “Nico” siguen y siguen en una larga lista, y aunque ahora se encuentra retirado, aseguran que sus gastos promedio hasta 2014 fueron de un millón pesos al año, pero sus familiares actualmente siguen sacando provecho de la situación.
Incluso, El Nico se ha visto envuelto en escándalos por los altos salarios que ha obtenido él y sus familiares pues todos han estado en la nómina del DF y en la Asamblea Legislativa: su hermano Lorenzo Samuel Mollinedo Bastar era aviador con un sueldo de 36 mil pesos como director de Recursos Humanos en la delegación Álvaro Obregón; Rafael Marín Mollinedo, director de Servicios Urbanos, con 62 mil pesos, y Gloria Aparicio Bastar, subdirectora de Servicios Urbanos, con 20 mil pesos.
En la ALDF, el coordinador perredista René Bejarano tiene como asesor a Germán García Mollinedo, sobrino de Nicolás Mollinedo, con un sueldo de 20 mil pesos.
Por último, Arturo Abreu Marín primo de Rafael Mollinedo Marín, Abreu Marín nació en Balancán, Tabasco, una tierra azotada por la pobreza y la marginación. En la época de Luis Echeverría y la “guerra sucia” contra los disidentes de la izquierda mexicana, Abreu Marín trabajaba en la subdelegación de Gobierno de la Delegación Milpa Alta, en el entonces Distrito Federal, y fue testigo de cómo el profesor Carlos Hank González transformó la ciudad.
En la época de José López Portillo, fue delegado del entonces brazo social de la presidencia: Banobras, pieza clave en el presidencialismo mexicano. Así de 1975 a 1989 fungió como un funcionario de la institución en los estados de Chiapas, Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Tabasco, Chiapas y Veracruz. El sureste rebelde mexicano lo conoció como ninguno y en cierta medida, le tocó atestiguar el nacimiento de otra izquierda: el EZLN.
Durante la presidencia de la República de Miguel de la Madrid, el tabasqueño fue pieza clave de Banobras, particularmente en Tabasco, puesto que alternó con la gerencia regional y de la zona del sureste de la otra “caja chica” del Estado: Nacional Financiera.
Su desempeño lo hizo ser cercano a personajes oscuros de la política mexicana como Manuel Bartlett y Ernesto Zedillo pues al ser contralor en la Secretaría de Educación en Tabasco de 1992 a 1994, el contacto con los poderosos secretarios de Estado era frecuente.
La trayectoria política de Abreu Marín no se puede despegar de su natal Tabasco, ni tampoco de personajes priistas tabasqueños de alcance nacional, de los que fue colaborador fiel: los gobernadores Salvador Neme Castillo, Manuel Gurría Ordoñez y Roberto Madrazo Pintado. En cada uno de sus gobiernos don Arturo encontró trabajo, cobijo y amistades.
En el año 2000, el tabasqueño se sumó a la campaña a la presidencia de la República de Cuauhtémoc Cárdenas, mismo que fue derrotado por Carlos Salinas de Gortari. Luego de la escena trágica del fraude electoral en México, Arturo Abreu encontró cobijo en el gobierno de la Ciudad de México, su paisano, Andrés Manuel López Obrador lo hizo director de recursos humanos en el Capce.
También posee experiencia en la Comisión Nacional de Energía Nuclear en México, D.F., y en el Fondo de Planeación de la Industria Azucarera (México, D.F.). En dos ocasiones formó parte de la Asociación de Banqueros De México como presidente del Centro Bancario de Tabasco.
En la actualidad, Arturo Abreu Martín, coordinador de programas sociales para Quintana Roo, uno de los cargos más sensibles para el estado, cargo que se ha definido como la segundo gubernatura para Quintana Roo.
Los tres personajes que pregonan a los cuatro vientos la honestidad, la verdad y la transparencia sería muy bueno que empezarán por realizar sus declaraciones patrimoniales y de intereses antes de seguir tomándose fotos con los hombres poderosos de Quintana Roo, como lo han hecho en los últimos días tras el triunfo de Andrés Manuel López Obrador como Presidente de la República.

AM.MX/fm

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