SIMI VALLEY, CALIFORNIA.— Los republicanos se reunirán el miércoles para su segundo debate presidencial mientras los principales rivales de Donald Trump buscan mitigar el impulso del expresidente, quien tiene tanta confianza en superar las primarias del partido que nuevamente no lo hará . compartir escenario con ellos.
Desacuerdo con la agencia AP, siete candidatos republicanos estarán en la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan para un evento organizado por Fox Business Network. Trump estará en Michigan , pronunciando un discurso en horario de máxima audiencia en el que intentará capitalizar la huelga del Sindicato de Trabajadores del Automóvil y tratará de atraer a los miembros de base del sindicato en un estado clave para las elecciones generales.
El debate se produce en un momento crítico de la campaña republicana, cuando faltan menos de cuatro meses para que los caucus de Iowa lancen formalmente el proceso de nominación presidencial. Por ahora, Trump domina el campo incluso cuando enfrenta una serie de vulnerabilidades, incluidas cuatro acusaciones penales que plantean la posibilidad de pasar décadas en prisión. A sus rivales se les está acabando el tiempo para hacer mella en su ventaja, lo que está generando un sentimiento de urgencia entre algunos de enfrentarse más directamente al expresidente ante una audiencia de millones.
“Ésta no es una nominación que vaya a caer en sus manos. Hay que ir y vencer a los otros candidatos y uno de ellos resulta ser Donald Trump”, dijo Kevin Madden, estratega republicano y veterano de las campañas presidenciales de Mitt Romney de 2008 y 2012. “En este debate será interesante ver si la gente se da cuenta o no de que la arena está pasando por el reloj de arena con bastante rapidez en este momento”.
El expresidente también se saltó el primer debate el mes pasado en Milwaukee , donde los participantes se enfrentaron entre sí y evitaron en su mayoría ataques a Trump. De todos modos, casi 13 millones de personas lo sintonizaron .
Nikki Haley, ex gobernadora de Carolina del Sur y embajadora de las Naciones Unidas, atrajo multitudes más grandes y un nuevo interés después de su primer debate en el que atacó al empresario Vivek Ramaswamy sobre política exterior y señaló que ella era la única mujer en el campo.
Su equipo ha aumentado aún más las expectativas antes del miércoles por la noche, y les dijo a los donantes en un discurso reciente que están “listos para aprovechar el impulso después de que Nikki salga del escenario”.
“A medida que más votantes en todo Estados Unidos se conecten para ver el segundo debate, será una gran oportunidad para atraer aún más seguidores”, escribió en su correo electrónico la directora de campaña de Haley, Betsy Ankney.
También espera una gran noche el gobernador de Florida, Ron DeSantis , quien estará en el centro del escenario a pesar de las recientes dificultades para emerger como la principal alternativa a Trump . Su campaña anunció que también vio un aumento en la recaudación de fondos después del primer debate, pero probablemente será necesario un buen desempeño el miércoles para replicar eso.
“Es demasiado tarde para un buen desempeño”, dijo Christine Matthews, encuestadora nacional republicana. “DeSantis ha pasado de ser la principal alternativa a Trump a ser sólo uno más entre el grupo de rivales y estará bajo presión para actuar”.
El ex vicepresidente Mike Pence , el senador de Carolina del Sur Tim Scott y Ramaswamy también buscan momentos decisivos. Ramaswamy acaparó la atención con frecuencia en Milwaukee, pero fue criticado por muchos candidatos que intentaron exponer su falta de experiencia política.
También estarán en el escenario el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum , y Chris Christie , exgobernador de Nueva Jersey, quien ha construido su candidatura a la Casa Blanca en torno a criticar a Trump.
El exgobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, no logró calificar después de realizar el primer debate. La campaña de Hutchinson dice que también irá a Michigan para dar una conferencia de prensa criticando a Trump.
Antes del debate, muchos participantes se reunieron con los principales partidarios, donantes y periodistas para demostrar que están en la mejor posición para seguir adelante.
Reed Galen, cofundador del Proyecto Lincoln, una organización fundada por conservadores que se oponen a Trump, dijo que si bien todavía cree que el expresidente será finalmente el candidato republicano en 2024, el debate del miércoles ofrece una oportunidad para que otros recuperen terreno.
“Hay oportunidades a la vista porque Trump las da por sentado”, dijo Galen.
El sitio es simbólico dado que Reagan ha sido durante mucho tiempo un ícono republicano cuyas palabras y momentos clave todavía dan forma a la política republicana en la actualidad. Pero además de pelear con los líderes de la biblioteca Reagan, Trump ha remodelado el partido y se ha alejado de las posiciones políticas tradicionales del Partido Republicano, incluida una política exterior contundente y una oposición a Moscú.
Si bien se recuerda a Reagan por ir a un Berlín dividido y pedir al líder soviético Mikhail Gorbachev que “derribe este muro”, Trump a menudo ha simpatizado con el presidente ruso Vladimir Putin y recientemente dijo: “Yo era la niña de sus ojos”.
Pence, en un discurso reciente, pidió a los conservadores que rechacen el “canto de sirena del populismo” de Trump. Pero Ramaswamy atacó a Pence en el primer debate al declarar que “no es de mañana en Estados Unidos” -una inversión del famoso eslogan de la campaña de Reagan de 1984- y decir que los republicanos que siguieron a Reagan no estaban en sintonía con un partido dominado por Trump.
“Lo triste es que la ironía -y no sé cuántas personas lo entenderán- es que Ronald Reagan no pudo obtener la nominación republicana hoy”, dijo la ex gobernadora republicana de Nueva Jersey, Christine Todd Whitman, quien ahora es asociarse con voces demócratas para promover el centrista Partido Adelante. “No está lo suficientemente lejos”.
AM.MX/fm
