Ciudad de México.- El Museo Archivo de la Fotografía, centro cultural de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, ofreció una charla titulada “Vivian Maier a Color” el pasado 3 de septiembre. El evento estuvo a cargo del fotógrafo Moisés Masliah, quien profundizó en el impacto de la obra de la fotógrafa estadounidense Vivian Maier y su influencia en la fotografía callejera de Nueva York y Chicago.
En presencia de Lizbeth Ramírez Chávez, responsable del museo, Masliah donó una de sus fotografías al acervo del recinto. La imagen, que captura un edificio histórico en 16 de Septiembre y Bolívar reflejado en un charco tras una lluvia intensa, será ahora parte de la colección del museo. “A partir de este momento, esta fotografía forma parte de nuestro acervo, y queremos agradecerte por tan noble causa”, expresó Ramírez Chávez durante la ceremonia de entrega, que tuvo lugar en el segundo piso del museo, junto a la exposición “Opalescencia de lo intangible: Daguerrotipo de viaje de Arturo Talavera”.
Masliah recordó cómo el trabajo de Maier, descubierto en 2007 por el realizador y fotógrafo estadounidense John Maloof, comenzó a ser reconstruido a partir de una caja de negativos adquirida en una subasta. “Dicen que una de las verdades más importantes de los fotógrafos de calle es que deben aprender a ser invisibles o, por lo menos, convencerse de ello”, reflexionó Masliah sobre la habilidad de Maier para capturar la esencia de la vida urbana con una visión única.
El fotógrafo autodidacta destacó la singularidad de Maier en la fotografía callejera, especialmente en blanco y negro debido al alto costo del revelado a color en su época. “Vivian Maier fue una extraordinaria fotógrafa que nunca conoció su éxito. Las fotos existen y su vida está documentada”, subrayó Masliah, desmintiendo el falso rumor sobre la existencia de Maier propalado por el fotógrafo Joan Fontcuberta.
Durante su charla, Masliah presentó una serie de fotografías a color de Maier, explicando cómo su trabajo estuvo influenciado por la exposición “La familia del hombre” curada por Edward Steichen en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Este impacto llevó a Maier a desarrollar un estilo de fotografía callejera que combinaba anticipación, paciencia y un agudo sentido del color.
“Su trabajo a color es una serie de fotografías pensada a través de elementos que, en blanco y negro, no funcionarían”, concluyó Masliah, describiendo la obra de Maier como una expresión objetiva, sincera y honesta que, a pesar de ser realizada en gran parte para ella misma, dejó un legado duradero en la fotografía.
AM.MX/CV