Por Mouris Salloum George *
Tiene sus ventajas ser ya una potencia económica del Primer Mundo. Se cumplió el sueño saliniano de ser jugador en las Grandes Ligas.
Mantener ese plus, es más que necesario. ¿Qué pensarían los diez millones de extranjeros que en 2017 nos prefieren como destino turístico, cultural, médico y de negocios, si en 2020 regresan y son recibidos en las mismas instalaciones aeroportuarias?
No señor, si se trata de vuelos, hay que estar a la altura. De eso se trata la posmodernidad y la competitividad. Pobre España.
Los mexicanos viven en santa pax neoliberal
Al terminar 2018, ya seremos 126 millones de mexicanos todavía arraigados aquí. Es obvio que tienen resuelto el problema de la alimentación. Será por eso que dejó de hablarse de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
En empleo seguramente antes del 30 de noviembre próximo, después de tantos “máximos históricos” en la materia, levantaremos la bandera blanca y 56 millones de compatriotas que forman la Población Económicamente Activa (PEA), asegurados el pan, el pecho, la salud y la educación de su prole, disfrutarán de sus vacaciones de invierno, mínimo, en Orlando, Florida.
Para 2019, seguramente habrán terminado en el deshuesadero o en los corralones los ruidoso boshitos que serán suplidos por silenciosos modelos de última generación, conducidos por sistemas digitales. Resuelto el problema de la movilidad en las ahora contaminadas metrópolis.
Ocho millones de jornaleros agrícolas, competidores ya en el marcado global, si viajan a los Estados Unidos lo harán debidamente documentados y sólo a visitar a familiares y aprovechar algunos días para andar de shopping.
Los 15 millones de indígenas ya están en el círculo virtuoso de la economía. De despojados y maltratados por los patrones trasnacionales, ha podido por fin lograr que su mano de obra, su patrimonio físico y su cultura sean valorados humanamente y pagados en capital accionario de los corporativos. Quién sabe si en dólares.
Todo, gracias a las grandes reformas transformadoras
La población discapacitada no es más objeto de discriminación y malos tratos. Los jubilados han podido finalmente disfrutar de una vejez digna, gracias a las correcciones en la gestión de los regímenes pensionarios.
Se han satisfecho, pues, las expectativas abiertas por las grandes reformas transformadoras.
Existe, sin embargo, un pelillo en la sopa. No puede darse salida aún a la prioridad de las prioridades una vez resueltos los grandes problemas nacionales. Esa cosa anunciada como Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, que hoy ocupa principalísimo lugar en la agenda mundial.
Ni la gran infraestructura para evitar las inundaciones, ni el costo de la tecnología para prevenir embates climáticos, ni la contratación de geólogos extranjeros para detectar terremotos, ni la eficacia en la operación de los drenajes profundos, han sido tan emproblemados como el NAIM.
Se ocupan en el debate los Presidentes, los secretarios encargados de despacho, los contratistas, los traficantes de influencia, los comisionistas. Los medios de comunicación tanto electrónicos como impresos no pueden perder la nota. Por eso tiene reporteros, fotógrafos y camarógrafos en guardia permanente. No vayan a chacaleados con la noticia de que el aeropuerto va. ¡Qué país!
*Director General del Club de Periodistas de Mèxico, A.C.