CIUDAD DE MÉXICO.- Roberto Borge Angulo, ex gobernador de Quintana Roo, durante su administración (2011-2016) vivió en las sombras, bajo un manto protector de impunidad que había creado su antecesor y maestro político, Félix Arturo González Canto, y de la cual sacó todo el provecho posible.
Días después de haber protestado como gobernador constitucional de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, se reunió en su natal Cozumel con algunas personas de “criterios amplios”, con quienes según algunos cercanos fueron los que pusieron el dinero para su campaña… Con los “gruesos” de la mafia en Quintana Roo, quienes hicieron poderoso al “Gato” Félix…
Con los líderes de las malas costumbres, con quienes envenenan a los jóvenes y a los miles de turistas que visitan las paradisíacas playas quintanarroenses… Con los encargados de las plazas, los jefes de la mafia, con quienes se pactó territorios y lugares para “trabajar” sin ser molestados, claro antes de la llegada del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), donde se destapó una carnicería que hasta la fecha continúa.
Por esas acciones es que la Subprocuraduría Especial en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) inició una investigación, paralela a la que enfrenta el ex gobernador por lavado de dinero y desvío de fondos públicos.
De acuerdo con información obtenida de la Procuraduría General de la República (PGR), los federales investigan, hasta el momento, el nexo directo de Borge Angulo con “Doña Lety”, esto debido a documentos obtenidos luego de la incautación de un par de cajas privadas pertenecientes a la líder del Cártel de Cancún, Leticia Rodríguez Lara “Doña Lety” o “La 40”, en su domicilio ubicado en Villa Magna.
En una de ellas, de acuerdo con información protegida estaba rotulada a nombre de su ex secretario privado, Manuel Marrufo, y reenviada a su esposa en ese entonces, Mariana Zorrilla Erales.
Dicha información fue dada a conocer por Sol Quintana Roo, de manera oportuna, causando conmoción entre los ciudadanos, más no entre las autoridades locales, como la Fiscalía General del Estado que siempre se hizo de la “vista gorda” en cuanto al tema.
De acuerdo con las investigaciones de Sol Quintana Roo, Doña “Lety”, fue quien durante el gobierno de Borge Angulo cuidó el equilibrio de Cancún; casualmente donde incautaron las cajas que vinculan al secretario privado del ex mandatario y a su ex esposa con el crimen organizado fue en Villa Magna, fraccionamiento donde vivieron algunos de los colaboradores del ex mandatario como Jorge Eugenio Acevedo Marín.
De acuerdo con investigaciones realizadas, tanto la familia de Roberto Borge Angulo como la de Mariana Zorrilla estaban en quiebra total y tuvieron que unir fuerzas a través de Félix González Canto. Este último, fue quien convenció a Mariana Zorrilla de que se casara con “Beto” Borge por lo que ambos firmaron un documento más que matrimonial, un pacto sagrado, para abandonar la pobreza y llegar a la realeza.
También habría que recordar, que hace un par de años, cuando Roberto Borge Angulo aún era el gobernante de Quintana Roo uno de sus ex choferes, preso en la cárcel de Cancún por extorsionador, desde prisión envió un correo a la Embajada de los Estados Unidos en México, en el que ofrecía dar datos concretos de la relación del mandatario y de varios de sus colaboradores con la mafia cubana, el narcotráfico y el tráfico de ilegales.
Esa información se esfumó gracias al ex Fiscal General de Quintana Roo, quien movió cielo, mar y tierra para borrar toda evidencia. En septiembre de 2015, el cubano, nacionalizado primero español y luego mexicano, Luis Manuel Álvarez Adán, confinado en una de las celdas de la cárcel municipal de Cancún, pidió hablar con autoridades mexicanas o agencias extranjeras y en apoyo a su petición envió el siguiente correo a la Embajada de los Estados Unidos:
“Debe ponerse en contacto conmigo el FBI, la DEA o Seguridad Nacional. Estoy en la cárcel de Cancún. Trabajé como escolta de Roberto Borge Angulo y tengo información del trasiego de cubanos desde las costas de Cuba hasta las de Quintana Roo, donde, con la ayuda del gobierno, por un 45 por ciento de las ganancias de millones de dólares, hacen llegar a los indocumentados cubanos hasta los EU”. ¿?
En su mensaje electrónico, también hizo una acusación muy grave, al afirmar que él había sido testigo, en varias ocasiones, del cobro del 40 por ciento que hacía el gobierno quintanarroense al crimen organizado por dejarlo “operar” “Yo escoltaba a Iván Eliud Garibay Osorio, que era director Jurídico y de Gobierno en la Zona Norte, para que cobrara el dinero en distintos puntos de Cancún.
Álvarez Adán, fue detenido el 30 de diciembre de 2014, por agentes judiciales en cumplimiento de una orden de aprehensión girada por el Juzgado Cuarto Penal, derivada de la causa penal 570/2014, por el delito de extorsión en agravio de un empresario por la cantidad de 300 mil pesos y quedó confinado en la cárcel de Cancún.
En 2013 se inició la averiguación previa 1373/2013 por el delito de extorsión por 300 mil pesos, en agravio de un empresario originario de Puebla y radicado en Cancún. (sic) Las denuncias fueron las siguientes: 0792/2012, 12 de enero 2012, privación ilegal de la libertad y amenazas; 0265/2012, 28 de mayo2012, amenazas y lesiones; 0410/2013, 26 de enero 2013, amenazas y 4634/2013, 8 de septiembre de 2013 por amenazas y daño. En su acusación contra Borge Angulo, dijo que éste hizo negocio con los recursos naturales y José Mauricio Góngora Escalante, con la mafia cubana, dedicada al robo de embarcaciones, tanto de lanchas rápidas, como de mediano calado y hasta yates de lujo.
En las naves grandes era donde trasladaban los ilegales, principalmente de Cuba, hasta llevarlos a los Estados Unidos. En ese tiempo todos sabían que la mayoría de las embarcaciones eran robadas, principalmente en Miami, Florida, pero nadie intervenía y se les veía ir y venir, diariamente, por todas las zonas turísticas: Isla Contoy, Playa Aventura, Tulum, Puerto Juárez, Isla Holbox, Laguna Nichupté y Laguna Makax, sin que nadie las molestara. Una muestra de que bajo esa práctica se incrementó el número de indocumentados cubanos, es el hecho de que en 2011 entraron a Quintana Roo 7 mil 700 ilegales y en cambio, en el 2015, más de 24 mil.
Cabe acotar que el 11 de enero de 2003, Góngora Escalante fue acusado de los delitos de robo calificado y fraude genérico por un millón 274 mil 173 pesos, cuando era gerente de ventas de la Agencia Superior de “Cervezas Cuauhtémoc Moctezuma, S.A. de C.V.”, en Playa del Carmen y fue hasta cinco meses después, el 24 de junio de ese mismo año, cuando fue aprehendido por la Policía Judicial y recluido en la cárcel municipal. Cuatro días después se hizo evidente el tráfico de influencias, cuando el 28 de junio de 2003 el Juzgado Mixto de Primera Instancia del Distrito Judicial de Solidaridad, a cargo de Dulce María Balam, dirigió una misiva a Fernando Alonso Ávila Peniche, director de la cárcel municipal de Playa del Carmen, donde le otorgaba el auto de libertad.
Fueron 11 años consecutivos en que la delincuencia organizada fue protegida por los gobiernos quintanarroenses. Los ex gobernadores priístas Félix Arturo González Canto y Roberto Borge Angulo, respectivamente, fueron los responsables del caos en que se encuentra la entidad, originado por el crimen organizado, al vender la plaza dos veces a organizaciones rivales. Así lo revela el resultado de las indagatorias realizadas a raíz de la captura en Panamá de Borge Angulo, con lo que comenzó a destaparse la cloaca que se gestó desde que González Canto asumiera la gubernatura, en abril de 2005, al entablar relaciones simultáneamente con el Cártel de Sinaloa y el Cártel del Golfo, cuyos sicarios, “Los Pelones” y “Los Zetas” y otros grupos, apéndices de los mismos, han mantenido una cruenta guerra durante más de dos sexenios por el control del territorio.
“En Quintana Roo los delincuentes son de cuello blanco, es decir, gente que ni te imaginas que está metida en el narco, la clase política, la clase empresarial están inmiscuidas en el lavado de dinero”. A lo largo de los sexenios de González Canto y Borge Angulo, todos los días, entraban y salían portafolios llenos de dinero”, declaró María Teresa Menéndez Monforte, correctora de estilo de un medio quintanarroense.
Como se recordará, en 2006 Quintana Roo registró un total de 798 casos de delitos contra la salud, la inmensa mayoría, es decir 703 fueron por posesión, de lo que se infiere el incremento del consumo de enervantes entre los quintanarroenses y al año siguiente alcanzó la cifra de mil 43 casos por delitos contra la salud, de los cuales 992 fueron por posesión y los restante por “narcomenudeo”. A lo largo de su mandato, González Canto sostuvo nexos con el clan de los Carrillo Fuentes, concretamente con Luis Carlos Carrillo Cano, sobrino de Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”, quien se ostentaba como empresario de la construcción.
Bajo esa fachada el “empresario” hizo millonarios negocios con Félix quien le otorgó la concesión para la construcción de la cárcel de Cancún, pero al descubrirse su relación las obras se suspendieron.
Otro vínculo más de Canto y Borge con el crimen organizado fueron los nexos que mantuvieron con Raúl Martins, conocido en Quintana Roo como “El zar de la trata de Blancas”, de quien se dice que apoyó la campaña de Borge Angulo por indicaciones de González Canto, ambos relacionados con miembros del Cártel de Juárez, del llamado “Señor de los cielos”.
En otro punto, según notas periodísticas de aquella época, tanto González Canto como Borge Angulo protegieron al ex banquero neoliberal Roberto Hernández Ramírez (Banamex.Accival), para que los desembarcos de cargamentos de cocaína procedentes de Colombia se siguieran llevando a cabo en Punta Pájaros, propiedad costera del magnate, que se localiza en el centro de la Biosfera de Sian Ka´an.
Los nexos del senador, Félix González Canto, con los cárteles del narcotráfico y, la venta infame de la reserva territorial de Quintana Roo, explicaría el origen de su fortuna. Durante el sexenio de González Canto (2006 al 2012), el Instituto del Patrimonio Inmobiliario del Estado de Quintana Roo (IPAE), vendió 877 predios a particulares. De esos terrenos, 406 se localizan en Playa del Carmen y pasaron de ser patrimonio del estado a ser propiedad privada; en Cozumel, vendió 176 predios, en Cancún, 156 y en Chetumal, 139.
Esas reservas territoriales, fueron vendidas a particulares a precios “preferenciales”, muy por debajo de su valor comercial real; además de que los beneficiarios de la venta fueron amigos, empresarios, familiares y políticos, con lo que se conformó la estrategia ideal para el “lavado” de miles de millones de pesos. Además, esa cadena de actividades ilícitas dio paso a una imparable ola de violencia, de tal manera que puntos turísticos como Cancún, Playa del Carmen, Isla Mujeres y Cozumel, cuyo principal atractivo era la tranquilidad, pasaron a ser verdaderos focos rojos del crimen organizado.
Así, se convirtió en una zona de alto riesgo por la inseguridad, donde los secuestros, extorsiones, robos a mano armada, “levantones”, cobros por derecho de piso y ejecuciones han estado a la orden del día y las víctimas son lo mismo ciudadanos comunes que turistas y empresarios, por lo que muchos hombres de empresa decidieron abandonar el estado ante la falta de garantías.
Borge Angulo ya está preso, pero sus sombras continúan dañando a Quintana Roo, su lealtad con Félix González es tan grande que prefiere seguir en la sombra antes que quemarlo y enviarlo a la cárcel.
AM.MX/fm