CARACAS, VENEZUELA, 16 de enero (AlmomentoMX).- Sin un pronunciamiento oficial que detalle lo que ocurrió con el ex inspector del Cicpc, la noche de este lunes circuló la foto del cadáver de Óscar Pérez en el lugar que tenía como refugio y que quedó totalmente destruido por balas y granadas.
Pérez alcanzó a narrar lo que estaba ocurriendo mientras recalcaba su disposición a entregarse.
Este martes, el coordinador de Provea Inti Rodríguez, señaló a los medios que Venezuela está frente a posible ajusticiamiento. La organización de DDHH habría advertido este lunes que el procedimiento pudo desencadenar en una ejecución extrajudicial.
En uno de sus últimos videos insiste al “mayor” que comandaba la operación, que cesen el fuego y se proceda a la entrega controlada. A esto el funcionario responde afirmativamente e incluso asegura que la orden de Maduro es garantizarle la vida.
Pérez casi llegó a transmitir su propia muerte.
Sin embargo, después del mediodía hubo un silencio abrumador de parte de Óscar Pérez y de las autoridades que solo se limitaron a lamentar la muerte de los oficiales de la Policía Nacional que cayeron en el procedimiento.
Las organizaciones de derechos humanos Provea y Cofavic alertaron al mundo que Venezuela había vivido ese día un hecho abominable que merecía el repudio de toda la comunidad internacional.
A finales de la tarde corría la información que daba cuenta de la detención del dueño de la vivienda donde se refugiaba Pérez, de nombre William Alberto Aguado Sequera, médico cirujano.
Los propios funcionarios filtraron a la prensa la fotografía de Pérez tendido en el piso bajo una vivienda de la que solo quedaron escombros y algunos pilares.
El cuerpo de Óscar Pérez habría sido llevado hasta la morgue de Bello Monte, la principal de Caracas, que para la noche estaba acordonada de funcionarios policiales.
AM.MX/fm