Diego Ortiz
Ahora nuestros paisanos en Estados Unidos son “los héroes vivientes” de acuerdo al presidente Andrés Manuel López Obrador quien en el marco de su Primer Informe de Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador destacó el respeto mutuo que existe con su homologo de Estados Unidos, Donald Trump, así como subrayó la defensa a de los migrantes mexicanos en el país vecino ante posibles violaciones de derechos humanos.
“Hemos procurado que la relación bilateral con Estados Unidos se conduzca con base al respeto mutuo, la cooperación para el desarrollo y la soluciones negociada”, dijo el mandatario desde Palacio Nacional.
Ni una mención a los miles de mexicanos deportados en los últimos meses por el gobierno de Estados Unidos, ni de las redadas que separan familias, que dejan a niños de origen mexicano en el abandono o al cuidado de instituciones públicas, ni un dato del maltrato, del aumento de las agresiones y crímenes de odio alentadas de la Casa Blanca. Puro amor y paz.
Eso si se presumió, como logro de gobierno, cabe decir como también en su momento lo hicieron los gobiernos del PRI y del PAN, el envío de remesas por parte de nuestros paisanos que viven y trabajan en Estados Unidos.
López Obrador subrayó que la aportación que hacen los “héroes vivientes”, que son los migrantes mexicanos, quienes en los primeros seis meses del año enviaron remesas a sus familiares 16 mil 845 millones de dólares, el monto más alto que se ha registrado en toda la historia del país. “Las remesas son la principal fuente de ingresos de México, aquí sí yo lo promuevo”, presumió.
Apenas hace algunas semanas, lideres migrantes de estados como Michoacán y Tlaxcala, denunciaron y lamentaron que el gobierno federal haya detenido los recursos para el Programa 3×1, que apoya iniciativas para proyectos que contribuyan al desarrollo de sus localidades en México, mediante la aportación de los tres órdenes de gobierno y las remesas enviadas por ellos.
También otros datos señalan que cada semana miles de mexicanos son deportados desde Estados Unidos. La Casa de Migrantes en Matamoros, informó que a partir de julio se ha detectado, sólo en esa frontera con Brownsville, Texas, más de cien deportados al día. Ello sin contar otras garitas más transitadas como Tijuana, Mexicali o Ciudad Juárez. Hablamos de miles cada semana.
A nivel nacional, de enero a mayo se registraron un total de 89 mil 185 “repatriaciones” de mexicanos por no llamarlas por su nombre “deportaciones”. Es decir, la tendencia más alta en los últimos tres años.
Los otros datos que no se mencionaron en el Primer Informe fueron la creación de la “Border Patrol” mexicana vía la Guardia Nacional y la Policía Federal que han superado, junto con el Instituto Nacional de Migración, así como la presión de Donald Trump al gobierno mexicano, todos los records en deportaciones de centroamericanos desde México.
En abril, casi 15 mil migrantes fueron deportados desde México, un incremento de los casi 9 mil 100 deportados en marzo, de acuerdo a datos de la Secretaría de Gobernación. El conteo mensual se incrementó aún más en mayo. En los últimos dos meses, el gobierno de López Obrador deportó un 67 por ciento más de personas migrantes que la cantidad deportada por su predecesor, durante este mismo periodo en 2018.
Ello sin mencionar las otras historias de africanos y haitianos maltratados por Policías Federales en Tapachula, Chiapas en estas últimas semanas que piden declarar al gobierno mexicano “emergencia humanitaria”. Sumado a los miles centroamericanos, principalmente mujeres y niños “asegurados” y “repatriados”, como dicen los boletines oficiales, por parte de la flamante Guardia Nacional en el lado mexicano del muro fronterizo de Trump. Tal Cual.