La iniciativa busca que ninguna mujer o persona gestante sea despedida de su trabajo por el simple hecho de ejercer su derecho a la lactancia, por lo que sólo podrán ser removidas o cesadas como consecuencia de una falta grave establecida en la ley. “La iniciativa que presentamos hoy es para extender la estabilidad laboral de seis meses a dos años, que es la recomendación de la OIT en el Convenio 183”, explicó.