CIUDAD DE MÉXICO.- El próximo diciembre entra en vigor la NOM-037, la norma que regula el teletrabajo en México y aunque ésta contempla las condiciones de seguridad y salud para el trabajo a distancia, incluidos los riesgos psicosociales propios de esta modalidad de trabajo; se trata de un primer paso para que el país transite hacia una cultura de cuidado a la salud mental laboral, afirma Anabel Fernández, CEO y fundadora de Affor Health, empresa especializada en gestionar y mejorar la salud psicosocial de las personas en las organizaciones.
La especialista añade que a partir del 2020 cuando el trabajo a distancia comenzó a popularizarse debido a la pandemia, también comenzaron a incrementar algunos padecimientos relacionados con la salud mental laboral como el estrés, ansiedad o burnout.
“Si bien la lectura inicial fue que la pandemia fungió como un factor de riesgo que nos tenía a todos alerta, con el paso del tiempo vimos que una mala gestión del teletrabajo y la falta de mecanismos para detectar y atender factores de riesgos fueron los detonantes de esta otra pandemia (la de la salud mental). Aunado a esto, los horarios definidos y el derecho a la desconexión digital, por primera vez están considerados como factores de riesgo psicosocial en la legislación mexicana y con eso ya se ganó la primera batalla”, apunta la CEO de Affor Health.
Para Fernández, la pandemia ha sido un precedente que ha contribuido a visibilizar la importancia de la salud mental laboral y se ve reflejado con políticas y normas como ésta, pero también con el interés que cada vez muestran más las empresas y directivos para cuidar de la salud mental de sus trabajadores.
La NOM-037 contempla la definición de riesgos psicosociales como “aquellos que pueden provocar trastornos de ansiedad, no orgánicos del ciclo sueño-vigilia y de estrés grave y de adaptación, derivado de la naturaleza de las funciones del puesto de trabajo, el tipo de jornada laboral y la exposición a acontecimientos traumáticos severos o a actos de violencia, por el trabajo desarrollado”.
“El impacto de la salud mental va más allá de un individuo, puede afectar al resto del equipo, incluso lo pueden somatizar, lo que termina afectando su salud física. Por otro lado, a nivel de las organizaciones, esto contribuye al aumento de problemas como ausentismo laboral y baja productividad”, agrega la CEO de Affor Health.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel mundial, se estima que cada año se pierden 12,000 millones de días de trabajo debido a la depresión y la ansiedad, lo que genera pérdidas en productividad de hasta 1 billón de dólares anualmente.
El primer paso lo da la legislación, el segundo las empresas+
Más allá de la ley, para la especialista en temas de salud mental, las empresas tienen un rol clave para el cuidado de la salud mental de sus equipos, ante esto recomienda:
⦁ Generar políticas claras de gestión del trabajo que contemplen horarios definidos, días de descanso y el derecho a la desconexión.
⦁ Promover campañas informativas sobre los beneficios de la salud mental en el trabajo.
⦁ Capacitación continua sobre temas de salud mental laborales para directivos y áreas de Prevención de Riesgos Laborales (PRL).
⦁ Incentivar una cultura de respeto y cuidado de la salud mental
⦁ Contar con mecanismos para detectar riesgos psicosociales.
⦁ Conectar a los trabajadores con especialistas en salud mental laboral.
AM.MX/fm