CIUDAD DE MÉXICO.- Juan Carlos Machorro, socio a cargo del área transaccional y experto en derecho aeronáutico y aeroportuario de la firma legal Santamarina y Steta, señaló que el actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), que tenía los días contados por su deterioro, está al borde de la inviabilidad.
“Viene dando señales de deterioro hace más de dos décadas y estaba destinado a cerrar definitivamente operaciones con la apertura del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco (NAICM). El NAICM habría tomado la totalidad de las operaciones del AICM con una capacidad de crecimiento en el mediano y largo plazo. El proyecto nos permitiría contar con un aeropuerto de calidad mundial por el resto del Siglo XXI. La cancelación del NAICM revivió por decreto la operación del AICM. El problema es que tal decisión lo dejó sin recursos económicos, operativos ni tecnológicos para continuar operando a los niveles previos a la pandemia. Está impedido para el corto y mediano plazo, ya no digamos en el largo plazo”, dijo.
El especialista recordó que el ingreso principal del AICM, la Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA), está comprometido cuando menos los próximos 25 años, para pagar la deuda de un proyecto cancelado, el Aeropuerto de Texcoco, en manos de tenedores de bonos (divididos en cuatro series con vencimiento en 2026, 2028, 2046 y 2047) cuyo monto de principal importa 4.2 miles de millones de dólares y alrededor de 8.5 miles de millones de dólares incluyendo el pago de intereses proyectado hasta la fecha de vencimiento final de la última serie en el año 2047. “Así no hay dinero para renovaciones, mantenimiento o actualización tecnológica de ningún tipo” señaló.
Juan Carlos Machorro añadió que, desafortunadamente, el incorporar al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y al Aeropuerto Internacional de Toluca (AIT) no resolverá el problema.
Explicó que aun resolviendo los retos con los que fue concebido el proyecto, el AIFA es insuficiente. Operando conjuntamente a su capacidad máxima, AIFA y Aeropuerto Internacional de Toluca AIT alcanzarían apenas el 50% de la capacidad total del AICM (50 millones de pasajeros al año). “Los retos son: operación simultánea con el AICM, resolver la infraestructura insuficiente de carga y traslado, lograr conectividad terrestre y aérea, dotar al sistema de movilidad y rutas de acceso, bodegas y hangares”.
“Los activos de infraestructura tienen una vida útil y el AICM ha visto ya sus mejores épocas. Haber revivido al AICM, aun acompañado del proyecto AIFA y del AIT, representa más problemas que soluciones. Sin entrar en polémicas de agenda política e inmediatez electoral, el país merece un aeropuerto de clase mundial en el Valle de México, cuya viabilidad operativa se extienda con amplitud el resto del siglo XXI. Vendrán tiempos mejores”, concluyó.
AM.MX/fm