CIUDAD DE MÉXICO, 10 de julio (AlMomentoMX).— ¿No te gusta usar corbata, pero así lo marca el código de vestimenta en tu oficina? Aquí una buena razón para dejarlas en el cajón: Podría dañar tu cerebro.
De acuerdo con un estudio realizado por el hospital universitario Schleswig-Holstein de Alemania, la presión que la corbata ejerce sobre las venas del cuello —carótida y yugular— reduce el flujo de sangre al cerebro un 7.5% y que esto puede afectar a las capacidades cognitivas.
Los investigadores, quienes acaban de publicar los resultados del estudio en la revista científica Neuroradiology, realizaron un experimento con 30 individuos con buenas condiciones físicas y saludables a los que se dividió en dos grupos, el primero se debía poner una camisa de cuello holgado, mientras que el otro grupo se le pidió que se pusiesen una corbata con nudo windsor apretada lo suficiente como para que resultase ligeramente incómoda.
Posteriormente, se hicieron resonancias magnéticas a todos los participantes en el estudio y así pudieron comprobar que el flujo sanguíneo se redujo hasta un 7.5% en el cerebro de aquellos que portaban las corbatas. Aunque la reducción de ese flujo no tiene consecuencias graves en el funcionamiento del cerebro, sí que puede afectar a las capacidades cognitivas del individuo.
Cabe recordar que en 2003, otra investigación realizada por el The New York Eye and Ear Infirmary of Mount Sinai, en Nueva York, reveló que usar corbatas muy apretadas aumentaba la presión en los globos oculares, lo cual es una de las principales causas del glaucoma. Los autores del estudio concluyeron que su uso prolongado en el tiempo podía aumentar el riesgo de sufrir problemas de visión.
Y si es necesario que uses la corbata, lo ideal es que permita un flujo suave de sangre al cerebro, para que éste reciba oxígeno y glucosa para un buen funcionamiento.
AM.MX/dsc