Francisco J. Siller
Dos temas de la “mañanera”, La presunción de inocencia y desde luego el tema cotidiano: La corrupción. Del primero, el Fiscal Alejandro Gertz Manero, puso el dedo en la llaga… “Hay dependencias del gobierno que no la respetan”. Del segundo una advertencia presidencial a su partido, a los de Morena, que piensan que no se les va a hacer nada, que ya están protegidos. A caminar derechitos y por el camino recto.
Aunque Gertz Manero no lo dijo directamente, su inferencia fue directa a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de Santiago Nieto, para él todos son culpables hasta probar lo contrario. Sus declaraciones y los actos de la UIF lo demuestran y mostró preocupación por la crisis jurídica que representa para la Fiscalía General de la República, que se vulnere el debido proceso.
López Obrador tuvo dos respuestas que destacar, la primera, que Santiago Nieto no hace nada sin consultarlo y la otra, que se buscará definir lo que se puede informar y que no. Poner límites a la UIF, en cuestiones de comunicación. Pero ahí quedó sin más. Lo que quiere decir que Nieto seguirá actuando con su política de primero culpables, dejando de lado la presunción de inocencia, que es un derecho constitucional.
De seguir así, el debido proceso ante los tribunales seguirá lesionándose y seguirá mucha gente lesionada, no solo en su patrimonio, sino en su integridad moral. Ser acusados ante la autoridad por delitos graves, implica el linchamiento social y una sentencia de culpabilidad adelantada, aunque ésta no tenga bases legales. La autoridad está obligada a investigar e implementar sin fallas sus expedientes.
Entonces Santiago Nieto y la UIF están obligados a respetar que toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en un juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias a su defensa.
Es por ello que al hacer declaraciones a los medios de comunicación por los casos que investiga, viola ese derecho humano y desde luego afecta el debido proceso es el conjunto de formalidades esenciales que deben observarse en cualquier procedimiento legal, para asegurar o defender los derechos y libertades de toda persona acusada de cometer un delito.
El titular de la UIF parece no estar de acuerdo con ello, pues piensa que la presunción de inocencia debe tener restricciones, porque hay riesgos que genere impunidad. Lo ha sostenido en lo publico y cuestionado si este tiene que ser absoluto en todas las dimensiones. Cree que todos los derechos humanos tienen restricciones. Es más papista que el Papa, sin claroscuros.
Y en el segundo tema de esta columna está la corrupción, que esta vez no se dirigió a sexenios anteriores, sino a los morenos y a autoridades surgidas de esas huestes. Que no estén pensando que porque son de Morena ya no se les va a hacer nada, ya están protegidos. No, ellos son los primeros obligados a actuar con rectitud, advirtió López Obrador. Tengan cuidado porque para demostrar que no hay impunidad, no vaya a ser que se lleven sorpresas.
Con su clásico tono y pausado al hablar, el presidente dijo que no estén pensando que: ‘Yo vengo del movimiento, yo soy fundador de Morena, yo soy compañero, amigo de Andrés Manuel, sí, desde el principio. Ah, sí, claro, todo eso es muy bueno. Somos amigos, compañeros, fundadores del movimiento, pero si te echas a perder, si te olvidas por qué llegamos a aquí… Llegamos para servir, en pos de otros, luchar para otros.
Eso va bien en la retórica mañanera, ¿pero en la realidad, será así?
