CIUDAD DE MÉXICO.- Para fortalecer las sanciones en materia de violencia vicaria y proteger, sobre todo, a las mujeres afectadas por dicho delito, el legislador Carlos Joaquín Fernández Tinoco propuso el endurecimiento de penas y sanciones, que van desde uno hasta seis años de prisión, así como la pérdida, al tiempo, de algunos derechos adheridos a la paternidad como la pensión por viudez o por relación filio-parental.
Al hacer uso de la tribuna, el representante ciudadano presentó una iniciativa que fue enviada para su evaluación y dictamen a la Comisión de Justicia con opinión de Igualdad de Género, para modificar dentro del título Octavo “Delitos contra el Derecho de los Integrantes de la Familia a Vivir una Vida Libre de Violencia” del Código Penal para el Distrito Federal la denominación actual del Capítulo Único, a fin de denominarlo: De la Violencia familiar y Vicaria.
“El objetivo de la iniciativa que hoy les presento es tipificar como delito, esta conducta antisocial que afecta y pone en riesgo a sectores importantes de la población como son las mujeres, niñas y niños”, indicó.
El integrante de la Bancada Naranja indicó que, por su naturaleza, la violencia vicaria es una forma extrema de violencia familiar, por lo que también se propone sea perseguida de oficio, por lo que se adiciona en el artículo 201 bis el concepto de violencia vicaria para que le aplique, lo relativo a las medidas preventivas necesarias para salvaguardar la integridad física o psíquica de la víctima.
“Estas modificaciones plantean imponer de uno a seis años de prisión al hombre que se encuentre o haya estado unido por vínculo matrimonial, de parentesco por consanguinidad, afinidad o civil, concubinato o relación de pareja dentro o fuera del domicilio familiar a una mujer y le provoque daño mediante una acción u omisión que afecte física, psicológica, económica o patrimonial a sus hijas, hijos o persona con la que tenga otro parentesco. Asimismo, el agresor, deberá cumplir con tratamiento psicológico, toda vez que no es sólo el inhibir este tipo de conductas y sancionarlas, sino también, permitir que el agresor pueda tener una verdadera readaptación social y no presente un riesgo en su entorno inmediato ni a la sociedad”, dijo.
Entre las sanciones y al paso del tiempo la iniciativa establece que, quien cometa este delito, perderá, además, llegado el momento, el derecho de pensión alimenticia que pudiera exigir a sus hijas e hijos, así como la perdida de la pensión de viudez de su cónyuge o concubina.
Fernández Tinoco expuso que alrededor del 80 por ciento de las víctimas de este tipo de violencia generan ingresos por sí mismas, lo que no es suficiente para solventar sus gastos familiares, más los procesos legales en contra del agresor, que pueden representar una tercera parte de una jornada laboral a la semana en atender temas legales, juicios y demás procesos para la recuperación de los menores, generando desgaste emocional, físico y psicológico.
“Es urgente cerrar la pinza a lo legislado por este Congreso el año pasado para incluir a la Violencia Vicaria en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia como un nuevo tipo de violencia”, enfatizó.
La iniciativa coincide con lo aprobado el pasado 8 de marzo por el Peno de la Cámara de Diputados que reformó y adicionó por unanimidad diversas disposiciones de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en materia de violencia vicaria, cuya minuta pasó al Senado de la República para sus efectos constitucionales y que hace una previsión a las entidades para tipificar en sus respectivos códigos penales dicha conducta.
“Considerando que una de las funciones que tiene a su cargo el poder legislativo es observar la problemática social y realizar las adecuaciones al marco normativo para prevenir y combatir aquellas conductas que afecten la ciudadanía, es razón suficiente para exponer la necesidad de modificar nuestro marco normativo en favor de las mujeres, niñas y niños principalmente, de esta ciudad”, finalizó.
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