domingo, enero 26, 2025

México enfrenta un enorme rezago en materia educativa

CIUDAD DE MÉXICO, 28 de marzo (AlmomentoMX).- La mayoría de los mexicanos entre 25 y 34 años de edad carece de educación preparatoria; algunas voces opinan que los bajos resultados educativos obedecen a una dinámica de corrupción, nula transparencia y rechazo a iniciativas de cambio protagonizada por el magisterio (SNTE y CNTE) y sus dirigencias.

El 85 por ciento del presupuesto anual para educación básica se destina a salarios de maestros, cuatro por ciento para becas, tres por ciento para infraestructura y dos por ciento para material educativo.

De cualquier forma, la OCDE sugiere al gobierno de México mantener el Instituto Nacional de Evaluación Educativa para valorar retos y logros del sistema educativo.

Sobre las intenciones del presidente López Obrador de echar abajo la reforma educativa, advierte que no es posible eliminar todas las estructuras y volver a empezar de cero, “porque nos paralizaríamos”. Señala que mientras se preserven los buenos elementos del sistema, no de un sexenio, sino de toda la construcción del sistema educativo mexicano, se seguirá trabajando.

La reforma educativa que el presidente López Obrador pretende echar abajo ha generado fuertes discusiones tanto en medios de comunicación como en recintos académicos, acerca de la responsabilidad de los maestros (sindicalizados del SNTE y la CNTE) en los bajos resultados del sistema educativo del país.

Uno de los puntos más controversiales ha sido si las reglas de contratación y promoción de los docentes basadas en la evaluación –como lo establece la reforma– inciden o no en su desempeño en las aulas y con ello en los aprendizajes de los alumnos en las escuelas públicas.

Algunas voces señalan que los persistentes bajos resultados educativos obedecen a una dinámica de corrupción, nula transparencia y obstáculos a las iniciativas de cambio, protagonizada por el magisterio y sus dirigencias tanto nacional como estatales.

Y es que según estudios de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), la mayoría de mexicanos entre 25 y 34 años de edad carece de educación preparatoria, lo que coloca a México en el último lugar de los países que la conforman.

Mientras que el promedio del organismo internacional es de 15 por ciento, nuestro país enfrenta un 52 por ciento de hombres y mujeres jóvenes sin educación media superior, según el estudio Panorama de la Educación 2018.

“En la mayoría de países, menos del 20 por ciento de jóvenes adultos (de entre 25 y 43 años) no ha completado su educación media superior, señala.

Este resultado aparece a pesar del aumento en el gasto por estudiante de nivel primara hasta bachillerato de nueve por ciento entre 2010 y 2015. En educación terciaria se redujo siete por ciento.

Al analizar el gasto en el bachillerato, México desembolsa cuatro mil 224 dólares por cada estudiante de bachillerato, mientras que el promedio de la OCDE es de 10 mil 196 dólares. La cifra en Luxemburgo y Austria llega hasta 19 mil 800 y 15 mil 400 dólares, respectivamente.

“La educación es vista continuamente como una herramienta para nivelar las desigualdades. Pero los logros educativos a menudo persisten de una generación a la siguiente, y también pueden perpetuar las desigualdades”, sostiene el organismo internacional.

Según la OCDE crecer en una familia donde los padres tienen bajos niveles educativos usualmente se traduce en que habrá menos apoyo financiero disponible para continuar con los estudios de los jóvenes mexicanos.

Las diferencias de género son menores en la mayoría de países, pero la diferencia supera los 10 puntos porcentuales en India, Portugal y España.

En el caso de México, el porcentaje de hombres sin estudios de bachillerato es ligeramente superior al de mujeres.

En estos momentos, la OCDE acompaña al nuevo gobierno en la redefinición de sus prioridades en materia educativa, según informó la directora del organismo, Gabriela Ramos.

Expuso que se observa con optimismo la apertura del gobierno federal, en particular de la Secretaría de Educación Pública, en torno a las recomendaciones que lleva a cabo para mejorar el Sistema Educativo Nacional.

La funcionaria de la OCDE enfatizó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) solicitó a la organización que la acompañe en esta nueva etapa de redefiniciones en materia educativa.

Dijo que por supuesto que colaborarán porque México es miembro de la OCDE, independientemente del gobierno que lo represente. “Ellos son los que definen sus prioridades y eso no está discusión”.

Señaló que las pláticas con la SEP son a nivel técnico y la OCDE deberá ajustarse a esas prioridades, “y ser muy honestos al decir al gobierno lo que observamos en el sistema educativo. Ese es el tipo de discusión que tenemos con las nuevas autoridades”.

En opinión de Gabriela Ramos, la comunicación con la SEP ha sido muy positiva y con mucha claridad respecto de los retos que comparten. “Esta apertura y debate basado en la evidencia para nosotros es lo más importante”.

Consideró importante la permanencia del Instituto Nacional para la Evaluación Educativa (INNE) como un organismo autónomo que señale los logros y retos del sistema educativo mexicano.

La funcionaria también se refirió a la derogación de la reforma educativa, en donde participó la OCDE y opinó que seguramente permanecerán algunos elementos.

“En nuestra experiencia no es posible ni factible eliminar todas las estructuras y volver a empezar de cero porque nos paralizaríamos. Mientras se preserven los buenos elementos del sistema, no de un sexenio, sino de toda la construcción del Sistema Educativo Mexicano, pues a seguir trabajando”.

La OCDE sugiere que las políticas educativas impulsen a adultos a prepararse continuamente para lograr que se adapten eficazmente a los nuevos requerimientos laborales, de lo contrario podrían crecer las tasas de desempleo.

Para dicha preparación, México requiere enfrentar, entre otros retos, ampliación de financiamiento e inversión privada y estatal, ya que gasta nueve mil dólares por estudiante en educación superior, cuando debería gastar el doble o el triple.

Estados Unidos gasta 26 mil dólares por estudiante de ese nivel y los países europeos 20 mil; aunque aclaró que también es importante el cómo se gasta ese recurso.

El financiamiento en México para estudiantes de educación superior se ha reducido, además, es necesario distribuir mejor esos recursos, porque actualmente se hace de forma poco transparente. Hay universidades regionales que tienen una diferencia de gasto hasta de cinco veces más, entre una y otra

Eso implica que las asignaciones no se hacen con visión estratégica, sino que son resultado de negociaciones, por lo que la OCDE recomienda tener un mecanismo transparente para la asignación, con base en una investigación profunda.

Ramos aclaró que la inyección de capital no garantiza calidad; “el aprendizaje está en el centro de todos los temas. Entones hay que reclutar a los mejores maestros”.

“Eso es fundamental, y esperamos que en México eso permanezca: apoyarlos en su formación profesional, reducir su carga administrativa y premiar a los buenos, que son la mayoría. El reconocimiento a un maestro lo empodera y eso se tiene que exponenciar”, puntualizó.

AM.MX/fm

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