CIUDAD DE MÉXICO.- Existen canciones que reconocemos sólo con escuchar un par de acordes, sin embargo, no siempre se conoce el nombre de la banda y menos aún el de sus integrantes, tal es el caso del grupo holandés Shocking Blue y su venus detrás del micrófono, Mariska Veres.
Durante la época dorada del rock, el éxito musical estaba reservado únicamente para bandas británicas y estadounidenses, pero Shocking Blue, una agrupación formada en el corazón de Holanda, logró romper el protocolo y se posicionó con su éxito ‘Venus’ en lo más alto.
Veres nació en La Haya el 1 de octubre de 1947. Su padre Lajos Veres era un violinista gitano, originario de Hungría, y su madre había nacido en Alemania de un matrimonio francés y ruso.
Veres comenzó su carrera como cantante en 1963, con el grupo de guitarras Les Mysteres, y más tarde cantó con los Bumble Bees en 1965, los Blue Fighters, Danny and his Favourites y General Four en 1966, y también con los Motowns, donde tocaba el órgano.
En 1968 la invitaron a unirse a Shocking Blue para sustituir al cantante principal Fred de Wilde, quien tuvo que dejarlos para alistarse en el ejército. Se atavió y maquilló entonces muy espectacularmente, con una gran y muy larga peluca morena. En 1969 Shocking Blue ganó fama mundial con el sencillo «Venus».
Shocking Blue se disolvió el 1 de junio de 1974 y Veres continuó su carrera en solitario hasta que el grupo volvió a reunirse en 1984. Este regreso fue un éxito, pero uno de los componentes originales, Robbie van Leeuwen, decidió dejar la banda, en parte porque se había trasladado a Luxemburgo, pero también por el éxito de su canción Venus.
Veres formó el grupo de jazz The Shocking Jazz Quintet en 1993, en el que intervino como cantante principal. De 1993 a 2006 tocó en otra reagrupación de Shocking Blue y también grabó un álbum con el cantante Andrei Şerban en 2003.
Veres no se casó nunca ni tuvo hijos, aunque sostuvo una relación de veinte años con el guitarrista holandés André van Geldorp. Amaba los gatos y no fumaba, bebía ni se drogaba. Al unirse al grupo Shocking Blue, dejó claro a los otros integrantes que no confraternizaría con ellos.
Evocando en una entrevista al magazine belga Flair sus primeros momentos de gloria, declaró: No era más que una muñeca maquillada; estaba fuera del alcance de cualquiera; hoy ya estoy más abierta a la gente.
Para 1967, Shocking Blue no era más que una banda local que apenas figuraba en las listas de popularidad de Holanda, sin embargo, tras la salida del vocalista Fred de Wilde para unirse al ejército, la banda invitó a Veres a tomar el lugar vacante.
Aquella invitación cambiaría el destino del grupo para siempre, pues para 1968 los holandeses ya se habían colocado en el número uno en Estados Unidos, Canadá, Australia, Bélgica, Francia, Italia, Suiza, España y muy cerca de lograrlo en Reino Unido.
Veres le dio a la banda un estilo único en una época en la que la mujer era vista como un objeto frágil y alejado del salvaje mundo del rock, un estereotipo que la vocalista nacida en la Haya destrozó con una voz potente, cargada de erotismo y que no pedía nada a los cantantes de la época.
En la canción Venus, escrita por el guitarrista Robbie van Leeuween, Veres se convierte en una diosa inalcanzable, sabedora de su sensualidad, la cual vuelve loco a cualquier hombre, en pocas palabras, una mujer aceptando su feminidad como su principal arma; algo totalmente nueva para la época.
“Una diosa en lo alto de la montaña ardía como una llama plateada, la cumbre de la belleza y el amor y Venus era su nombre (…) Bien, soy tu venus, soy tu fuego, tu deseo”, dice la letra de la canción que Veres y Shocking Blue colocaron las radios más importantes del mundo.
Al llegar a Estados Unidos, Veres enfrentó el sexismo imperante en los 60, algunos periodistas comenzaron a especular sobre su físico y su belleza, incluso alguno la llegó a llamar ‘pechugona’, ruido mediático que la holandesa silenció con talento puro arriba del escenario.
Además de su influencia en la música y el hecho de haber abierto las puertas del rock para el resto de Europa, más allá de Reino Unido, Veres pasó a la historia de la música por su estética de diosa inalcanzable, un look que fue retomado por varias mujeres alrededor del mundo.
Además de Venus, la banda alcanzó los más alto de las listas con ‘Never Marry a Railord Man’, ‘Mighty Joe’ y ‘Demon Lover’, sin embargo, la banda se separó en 1975 y Veres comenzó una carrera en solitario, sin poder igualar el éxito que tuvo con Shocking Blue.
La venus gitana holandesa del rock falleció el 2 de diciembre de 2006 a la edad de 59 años, víctima de cáncer.
AM.MX/fm