CIUDAD DE MÉXICO, 29 de noviembre (AlMomentoMX).- Michael Cohen, ex abogado personal de Donald Trump y uno de sus más cercanos consejeros, se declaró culpable de mentir ante el Congreso de Estados Unidos en el marco de la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
Cohen reconoció que mintió en una declaración escrita remitida al Senado sobre un proyecto para construir una Torre Trump en Moscú. Dicho proyecto, que no llegó a materializarse, constituye uno de los puntos clave en la investigación sobre la posible conspiración entre la campaña de Trump y el Kremlin.
Al contrario de lo que afirmó en su momento, el abogado ahora aseguró que siguió intentando sacar adelante dicho proyecto inmobiliario meses después de haber iniciado su campaña a la Presidencia.
La explosiva confesión, hecha en un juzgado federal de Manhattan después de haberse declarado culpable en agosto de quebrantar las leyes de financiación de la campaña, supone un nuevo giro en la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre el presidente de Estados Unidos y su entorno
El ex abogado de Trump señaló que mintió sobre las negociaciones y rebajó el alcance real de sus contactos con funcionarios rusos sobre el proyecto. Según Cohen, lo hizo por lealtad hacia Trump y para no interferir en su “mensaje político”.
Cohen mintió sobre fechas claves en las negociaciones de la operación inmobiliaria: estas continuaron hasta junio de 2016, un año después de que Trump anunciara oficialmente su campaña a la presidencia y semanas antes de convertirse en el candidato oficial del Partido Republicano.
En agosto del año pasado, Cohen informó al Congreso que en enero de 2016 se decidió que la operación inmobiliaria en Moscú no era viable y “no se continuaría avanzando” en ella. Lo hizo, según admitió este jueves, “para dar la falsa impresión de que el proyecto terminó antes del caucus de Iowa”, la primera gran cita del proceso de primarias.
Hasta ahora, Cohen había mantenido que, al atascarse el proyecto inmobiliario en enero de 2016, escribió a un asistente del presidente ruso, Vladímir Putin, pidiendo ayuda sobre la adjudicación de los terrenos y la financiación de la operación. Pero dijo que, al no recibir respuesta, el proyecto quedó parado definitivamente.
Ahora, en cambio, Cohen admitió que los rusos sí respondieron y negociaron con él sobre el proyecto en una llamada telefónica. Además, narró que informó personalmente a Trump sobre el desarrollo del proyecto en más de tres ocasiones. Por su parte, el presidente ha declarado reiteradamente que no tenía negocios con Rusia.
Tras conocer la noticia de la confesión, el presidente Trump ha dicho que Cohen es “una persona débil y no muy lista” que trata de obtener “una sentencia reducida”. Respecto a la operación inmobiliaria en Moscú, sobre la que ha asegurado que nunca se sintió entusiasmado, afirmó que tenía derecho a manejar sus negocios durante la campaña. “No realicé el proyecto”, apuntó, “no trataba de ocultar nada”.
En agosto pasado, Michael Cohen se declaró culpable en el tribunal federal de Manhattan de ocho cargos penales, entre ellos de evadir la evaluación de deuda tributaria, suministrar declaración falsa a un banco, inducir a contribución corporativa ilegal y contribuir de forma excesiva a una campaña.
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