Por Armando Rojas Arévalo
XIOMARA: Dice BENEDETTI que “cuando creíamos tener todas las respuestas, de pronto, cambiaron todas las preguntas”, y GALEANO: “…las cosas envejecen en un parpadeo, para ser reemplazados por otras cosas de vida fugaz”. Los cambios son vertiginosos y los paradigmas de hoy se hacen viejos mañana. Somos nómadas urbanos, condenados a vagar en las ciudades, siempre conectados, en un mundo que ya no tiene fronteras.
México, país de incertidumbres, provocado por el bombardeo de mensajes que nos cae como catarata aplastante a cada instante de nuestra cotidianidad y el contenido de mala calidad de la retórica del poder. Se ha roto la jerarquía de los valores, por la yuxtaposición de lo importante y lo banal, de la verdad y lo falso. De lo serio y la ocurrencia.
Tiempos de crisis en lo social y lo político; de la libertad de expresión, por la criminalización de la crítica; por la polarización y el ambiente de odio y descalificación.
Todo el mundo bloquea o paraliza cuando se le antoja la libre movilidad de las personas. Diez personas se juntan y son capaces de bloquear por horas la calzada de Tlalpan, en protesta porque las diez no tienen agua desde hace ocho días. Sales al trabajo y en la siguiente calle hay un bloqueo que te obliga a llegar tarde a la oficina. Hoy fui a mi clase a Ciencias Políticas, de la UNAM, y no pude entrar porque veinte jóvenes encapuchadas –“separatistas” se autodenominan- tomaron las instalaciones –a tres días que inició el semestre- hasta que no se cumpla el pliego petitorio de sus compañeras de Filosofía y Letras y los cuatreros que mantienen secuestradas las prepas 7 y 9. El pliego de las feminazis de Filosofía tiene un punto que no se puede cumplir: Que los maestros, jóvenes o viejos, tomen durante un año con ellas un curso de sensibilización sobre el respeto al género.
Los del Frente Popular Revolucionario –quién sabe quiénes son- bloquearon Palacio Nacional desde la madrugada y nadie entró ni salió de las oficinas, inclusive los senadores de MORENA que tenían un desayuno con el presidente.
Total, México, país del desmadre. Cada quien hace lo que quiere.
Tiempos de intolerancias…y decepciones.
Al comunicador que ejerce la libertad de disentir, se le señala. Se le grita ”traidor”, “chayotero”, “vocero del conservadurismo”, etcétera. Inclusive, se le persigue y se le sanciona duramente para que el resto de los periodistas reciba el mensaje intimidatorio sobre a lo que se atienen si continúan jodiendo.
SERGIO AGUAYO, colaborador del periódico Reforma y catedrático de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, recibió la sentencia de pagar 10 millones de pesos a HUMBERTO MOREIRA, para repararle el “daño moral” que le provocó al decirle corrupto.
No es este gobierno el que impulsó el castigo, sino el de CALDERÓN; sin embargo, en una administración que dice ser imparcial y que no procede en sus acciones con odio, sino con abrazos, que ocurran estas cosas es inexplicable. La sentencia fue emitida el 10 de octubre por la Sexta Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México. O sea apenitas, hace tres meses.
Artículo 19 muestra la preocupación por el actuar de la Sexta Sala, porque es contraria a lo establecido por la Constitución. La organización envió al Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México y a la Comisión de Disciplina Judicial, una carta con más de dos mil firmas de miembros de activistas, académicos, periodistas y grupos civiles para pedir el cese al acoso judicial en contra de SERGIO AGUAYO. Es más, el jueves, decenas de periodistas harán protesta afuera de la Suprema corte de Justicia en apoyo al comunicador.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la Declaración de Principios de la Libertad de Expresión dice puntualmente: “La protección a la reputación debe estar garantizada sólo a través de sanciones civiles, en los casos en que la persona ofendida sea un funcionario público o persona pública o particular que se haya involucrado voluntariamente en asuntos de interés público. Además, en estos casos, debe probarse que en la difusión de las noticias el comunicador tuvo intención de infligir daño o pleno conocimiento de que se estaba difundiendo noticias falsas o se condujo con manifiesta negligencia en la búsqueda de la verdad o falsedad de las mismas.”
JAN JARAB, representante de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, alertó el riesgo que acarrea esta decisión para el ejercicio de la libertad de expresión, al tiempo que sugirió realizar cambios normativos para evitar la autocensura. “La reacción cautelosa de la prensa ante esta sentencia puede ser una muestra de este efecto intimidatorio”.
Claro, en un país donde su presidente le grita “prensa fifí” a los periodistas, qué se puede esperar.
NOS QUEDAMOS, repito a BENEDETTI, sin respuestas, porque lo que surgen son más preguntas. Tiempos de retórica distractora. Como la del “cachito” del sorteo del avión presidencial, o lo que dijo la señora SHEINBAUM, abonando a esa distracción, que al que se saque el gobierno capitalino le condonará impuestos.
Uta –perdón- en manos de quienes estamos.
LO QUE DIJO el subsecretario de Gobernación, RICARDO PERALTA, muestra el nivel al que la política ha llegado, o mejor dicho la calidad de funcionarios que tenemos. “A chillidos de puercos, orejas de chicharronero”, dijo el honorable servidor público a propósito de las protestas de SICILIA y LEBARÓN en la Caminata por la Justicia y la paz. Ese es el respeto que se merecen la crítica, la protesta, la libertad de expresión.
TIEMPOS DE INCERTIDUMBRE hasta con la calidad de las medicinas.
El gobierno dice que los medicamentos importados tendrán el registro sin pasar por el proceso de certificación en México. En la industria farmacéutica se quedaron estupefactos. Que los enfermos se jodan.