CIUDAD DE MÉXICO, 5 de febrero (Almomento.MX).- La detención de Brayan Mauricio González, el Pozoles, jefe de narcomenudistas en el cártel de La Unión Tepito, abre la esperanza para resolver tres casos pendientes para la justicia en México: el feminicidio de la venezolana Kenny Finol, el feminicidio de otra joven extranjera de apenas 23 años y la desaparición de una chica mexicana de 27 años.
De acuerdo con HuffPost México, este fin de semana, el Pozoles fue detenido en Nezahualcóyotl, Estado de México, tras un largo operativo que le vigilaba los pasos. Fue una intervención rápida, sin disparos, en la que los agentes esperaron pacientemente a que sus escoltas lo dejaran solo con otra mujer, quien tiene el perfil de sus presuntas víctimas: extranjera, delgada, guapa, aparentemente escort, a quien el operativo la habría salvado la vida.
La detención del joven delincuente de solo 26 años terminó con meses de seguirle el rastro por narcomenudeo, extorsión, cobro de piso y explotación sexual de mujeres extranjeras, pero principalmente por el feminicidio de Kenny, su expareja, cuyo cuerpo fue hallado en febrero de 2018 en Ecatepec, Estado de México, con evidencia de tortura y desfigurada por el ácido que su victimario le echó en la cara.
Semanas antes, Kenny —escort en la página ZonaDivas.com, señalada por trata de personas— había denunciado en un video que su novio, el Pozoles, la golpeaba brutalmente y la había amenazado de muerte.
Las autoridades federales creen que no es la única víctima. El Pozoles es investigado como el autor material o intelectual de, al menos, un feminicidio más y la desaparición violenta de otra mujer.
Su otra víctima sería Karen Ailén Grodziñiski, de 23 años, una joven argentina que había llegado a México a buscar mejor suerte como bailarina y modelo, pero que terminó trabajando para la mafia que operaba para ZonaDivas.com. El Pozoles, un asiduo cliente de la página de sexoservicio, se habría enamorado de Karen, entablado una relación sentimental y exigido que dejara de visitar clientes.
Ella no dejó de hacer trabajo sexual. No queda claro si desoyó las órdenes del Pozoles porque tenía una deuda económica con ZonaDivas, porque estaba atrapada en una red de trata de personas o porque era su voluntad seguir como escort. Lo que sí se sabe es que en diciembre de 2017 su cuerpo fue hallad oen un hotel en la Avenida Revolución, al sur de la Ciudad de México.
Tras acusar falsamente al actor Alejandro Axel de cometer el homicidio, las autoridades capitalinas dirigieron la mira contra El Pozoles, que en aquel invierno ya había alcanzado el estatus de jefe en La Unión Tepito gracias a una larga carrera delictiva que empezó en su adolescencia como ladrón de locales en el Centro Histórico de la capital mexicana, cerca de la casa familiar en la calle Moneda, donde su mamá vendía pozoles y quesadillas. La violencia, la asfixia, los golpes, y lo que captaron las cámaras de video del hotel, eran consistentes con el modus operandi de ese joven criminal.
Su tercera víctima sería Karina Itzel Morales Baltazar, de 27 años, quien desapareció el 15 de diciembre de 2018 en Tlalnepantla, Estado de México. Las autoridades la identifican como la novia del Alexis, un presunto clonador de tarjetas de crédito que alguna vez fue cercano al Pozoles y que se convirtió en su rival. Este nexo sentimental no ha sido corroborado por agentes capitalinos, pero es una de las líneas de investigación más fuertes: Karina habría quedado en el fuego cruzado de dos jóvenes criminales.
El Pozoles, el narco que se habría convertido en asesino serial de mujeres
La detencion de Brayan Mauricio Gonzalez, el Pozoles, jefe de narcomenudistas
La apariencia de Karina, además, es similar a la de las otras dos presuntas víctimas del Pozoles: jóvenes, delgadas, voluptuosas,que buscaban escapar de la pobreza de sus barrios.
Además de Kenny, Karen y Karina, las autoridades de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) indagan en qué otros feminicidios estaría implicado el cártel de La Unión Tepito a través del interrogatorio al Pozoles, la pieza clave para resolver la ola de cuerpos de mujeres jóvenes halladas en habitaciones de hotel en Ciudad de México.
AM.MX/fm