martes, abril 23, 2024

#DESDELABARRERA: Huele a estrategia de seguridad muy mal ejecutada

Aletia Molina

La última vez que López Obrador se refirió (sin decir su nombre) al Cártel Jalisco Nueva Generación fue el 15 de junio, para desmentir un rumor que indicaba que su líder histórico, Nemesio Oseguera, El Mencho, había fallecido. El Presidente dijo que se trataba de noticias falsas y agregó que la estrategia de seguridad de su administración ataca las causas de la violencia, no a quienes la generan.

Una semana después, las áreas de inteligencia del gobierno detectaron mensajes que revelaban amenazas en contra de funcionarios de seguridad pública. El secretario Alfonso Durazo confirmó la intercepción de esas comunicaciones, aunque no quiso ligarlas directamente con el atentando en contra de Omar García Harfuch, jefe de la Policía de la CDMX, que dejó tres muertos.

Algo ocurrió para que tres horas después del ataque, el propio funcionario herido, adjudicara los hechos al CJNG, en un tuit. El ataque resulta simbólico por varias razones: la importancia del objetivo, la forma en la que se planeó y ejecutó, y la zona donde ocurrió.

Puede especularse sobre la rapidez con la que 19 de 28 personas que participaron en el atentado fueron detenidas, revelando su novatez, y toda la información que no podrán proporcionar. Pero si todo esto es auténtico, (sigo especulando)… que una organización delictiva se proponga matar al titular de la SSC-CDMX es un desafío al Estado mexicano. En las últimas cuatro décadas se han registrado todo tipo de agresiones contra funcionarios, más no contra un secretario capitalino.

El hecho pesa más cuando, desde la semana pasada, se sabía de la existencia de la amenaza contra los funcionarios, entre ellos, García Harfuch. Que los autores intelectuales hayan decidido ir adelante a pesar de las alertas encendidas, habla que se encuentran envalentonados y dispuestos a lo que sea. Es una declaración de guerra.

Informes de inteligencia revelan que el cártel aludido se ha fragmentado y es posible que hasta haya cambiado de liderazgo. ¿Contra quién va a ir la respuesta del Estado mexicano? El hecho incontrovertible es que el crimen organizado no escatimó en preparar y llevar a cabo un atentado a gran escala. Los objetivos están vulnerables. No es momento de regatear, con el argumento de la austeridad o el de vivir con la consciencia tranquila, la seguridad a quien debe tenerla. También es hora de revisar la estrategia, porque si bien la 4T argumenta que funciona, pero las bandas delincuenciales han demostrado que no.

#AlCalce

  1. Si hubiera sido el narco, estaría muerto.
  2. Si acusan al CJNG es por algo… ¿va por ahí?
  3. Está vivo, era un mensaje, él sabe de quién y por qué.

@AletiaMolina

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