MADRID, ESPAÑA, 30 de mayo (AlmomentoMX).- Muy estimada maestra Delfina, que conozco a través de referencias muy confiables para mí; toda mi simpatía y solidaridad.
Decirle que sigo con especial interés su campaña de acercamiento a la ciudadanía en el Estado de México, intentando romper la larguísima dominación del grupo que ha ostentado el Poder en ese Estado, como si fuera una herencia medieval, cuando entramos de lleno en el siglo XXI…
La regeneración de México, a estas alturas del partido, no es ya una disputa política habitual, estamos, creo yo, ante un asunto de supervivencia…
Rescato de mi memoria, una historia vivida en México, muchos años atrás.
Una Empresa vendía una serie corta de productos domésticos esenciales, su zona de actuación eran territorios marginales, nivel económico precario entre su clientela; mas de 100 camionetas hacían recorridos, cuidadosamente planeados, paraban en esquinas estratégicas, vendían en abonos y cobraban por quincenas, en el mismo lugar donde entregaban nuevos pedidos…
Una filosofía fundamental estaba en la mística de esta compañía; fiaba solamente a las mujeres, los directivos, origen italiano, me comentaban que se sentían orgullosos y felices con su decisión, que les había colocado en primer lugar entre sus potenciales competidores…
La tasa de incumplimientos, entre las mujeres mexicanas, me aseguraron los directivos, era extraordinariamente baja, más confiables las mexicanas que las alemanas… me quedé estupefacto, pero luego he descubierto que este episodio tiene un auténtico mensaje, reconfortante en el fondo para toda la ciudadanía…
Es evidente que estas estimaciones no se pueden traducir literalmente, pero indican algo, que debe ser contemplado y meditado en profundidad…
Muchos años después, siguiendo su campaña para la gubernatura del Estado de México, he rescatado esta vivencia; enfrentarse a algunas de las figuras más conectadas con perversos modelos que han gobernado nuestros País, era fácil, porque los vicios son ya inocultables, pero hacer frente a las artimañas, recursos, apoyos del más alto nivel junto a la ética de más baja calidad, requiere un temple y convicciones, que he creído reconocer en su figura
Las mujeres cumpliendo sus compromisos, con rigor, sin complejos ni mayores lamentaciones…por las calles de Nezahualcóyotl me vinieron desde mi memoria, observando su tenaz empeño en elevar el nivel de actuaciones públicas, la credibilidad y la esperanza en nuestro castigado y gran País.
Animo, toda mi solidaridad y afecto
Un cordial abrazo Ingeniero Carlos Galguera Roiz
AM.MX/fm