CIUDAD DE MÉXICO.- En septiembre de 2024, el consumo privado disminuyó 0.3% respecto al mes anterior, revirtiendo la tendencia alcista observada en los dos meses anteriores. Esta caída mensual se debió principalmente al consumo de bienes importados, que cayó 4.1%, la cual no pudo ser compensada por el crecimiento registrado en el consumo de bienes nacionales de 0.5% y de servicios nacionales con 0.2%.
De acuerdo con el análisis económico de VALMEX, en términos anuales, el consumo privado creció 1.7%, impulsado principalmente por un aumento de 4.2% en el consumo de bienes importados. En menor medida, contribuyeron los incrementos de 1.7% en el consumo de servicios nacionales y de 1.1% en el consumo de bienes nacionales. Es relevante destacar que el consumo privado representa aproximadamente dos tercios del PIB.
Por otro lado, la inversión fija bruta cayó 0.8% en septiembre, acumulando dos meses consecutivos en contracción. La inversión en maquinaria y equipo disminuyó 1.1%, mientras que la inversión en construcción bajó 0.4%, principalmente por la caída de 4.5% en la construcción no residencial, que no pudo ser compensada por el crecimiento de 5.8% en la constricción residencial. En comparación con septiembre de 2023, la inversión mostró una caída de 2.3%, destacando una caída de 5.2% en el sector de la construcción, el cual hila dos meses cayendo. Por otra parte, maquinaria y equipo
aumentó 0.8%. La inversión representa cerca del 20% del PIB.
El consumo privado mostró debilidad, ubicándose por debajo de la estimación oportuna, que anticipaba una caída de 0.1%. Además, los elevados niveles de inflación en el sector servicios y la expectativa de desaceleración económica podrían limitar su
desempeño en los próximos meses. Sin embargo, el uso intensivo de tarjetas de débito y crédito observado en octubre podría sostener cierto nivel de resiliencia en el corto plazo.
A ello se suman las promociones de fin de año, que podrían impulsar temporalmente el consumo. La inversión fija bruta, es probable que continúe mostrando debilidad en los próximos meses debido al proceso de transición gubernamental y a las posibles medidas proteccionistas que implemente el nuevo gobierno de Estados Unidos, lo cual podría reducir el atractivo de México como destino de inversión.
No obstante, en el mediano plazo, un factor de compensación podría ser el inicio de proyectos de infraestructura por parte de la actual administración.
AM.MX/fm