HÉCTOR MOCTEZUMA DE LEÓN
Cada vez que se comete un crimen o un robo en contra de un familiar de una persona que está en el poder, o bien a un amigo de los poderosos, en la Vox Populi se escucha siempre una frase: sí eso le pasa a los poderosos, que nos podemos esperar nosotros que somos del pueblo.
En Zacatecas fueron asesinados dos funcionarios municipales familiares de la familia Monreal, la dinastía que controla el estado norteño lo mismo en la gubernatura del Estado, que en la presidencia municipal de Fresnillo, municipio con grandes recursos mineros, o en otros cargos de elección popular, como las senadurías.
A qué le tira un simple cristiano cuando los asesinos no respetan ni a las personas ligadas al poder, a nada, pero hay algo más, cuando los delincuentes se van contra los familiares de quienes gobiernan un estado o un municipio, es una muestra del fracaso de la estrategia en contra de la inseguridad.
David Monreal miembro de la famosa dinastía integrada por 14 hermanos, entre ellos el más destacado, coordinador de los senadores de Morena en la Cámara Alta, en los años que lleva al frente del gobierno zacatecano ha sido incapaz de brindar seguridad a los ciudadanos que dice representar.
Por más que el gobierno federal ha enviado refuerzos para controlar la violencia en tierras zacatecanas, el gobernador no le entiende y la espiral de violencia creció desde que David llegó al Palacio de Gobierno. Se la ha pasado dando excusas echando culpas al pasado y no ha desaprovechado la oportunidad para decir que los homicidios dolosos y los delitos de alto impacto han bajado.
Nada más falso, Zacatecas es un hervidero, en donde lo mismo matan a policías que a gente de la sociedad civil, sin que hasta ahora, haya una respuesta efectiva en contra de las bandas que azotan impunemente a la población.
Si eso le pasa a los familiares de los hombres del gobierno, qué podemos esperar, dicen con justa razón los zacatecanos. En este caso hay seis detenidos. Lo que no pasa con quienes no son familiares de quienes gobiernan.
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¿Se acuerdan de Jesús Valencia, aquel perredista que fue delegado en Iztapalapa y que estuvo involucrado en un incidente cuando chocó una camioneta que le habían prestado al amparo de su cargo? Incidente que quedó impune porque el señor Valencia se pasó a Morena. Bueno, pues les cuento que ahora es uno de los coordinadores de la campaña de Claudia Sheinbuam. Por cierto ayer estaba comiendo en uno de los restaurantes más lujosos y caros del sur de la Ciudad de México, justo en San Ángel…En el asesinato político de cada día, ayer fue últimado Andrés Valencia Ríos, ex alcalde de San Juan Evangelista en el Estado de Veracruz, antes le tocó a Jair Martín Romero, aspirante a una diputación por Ecatepec en el Estado de México.Todavía no empieza lo bueno y los asesinatos políticos siguen a la orden del día…César Yáñez aquel de la suntuosa boda que molestó a Andrés Manuel López Obrador, a quien se ex pareja la periodista Elena Chávez denunció por ser quien recaudaba el Cash para López Obrador, renunció a la subsecretaría de Gobernación en la que estuvo como florero durante casi dos años, para incorporarse al equipo de Claudia Sheinbaum.
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