Este problema aparece incluso en personas activas o que creen alimentarse de manera saludable, porque muchos hábitos aparentemente sanos, como desayunar fruta o yogures bajos en grasa, o consumir bebidas energéticas, generan picos de azúcar.
Se trata de tres medicamentos (semaglutida, liraglutida, tirzepatida) que imitan hormonas intestinales y que tiene el efecto de reducir el apetito, retardar el vaciado gástrico (hacen que la persona se sienta llena más tiempo) y mejorar la regulación de la glucosa, pero su uso para ayudar a la gente a perder peso ha sido polémico.
Estará dirigido a toda la población que llegue a un centro de salud de las instituciones de salud federales, y “si alguien no los trató bien” o si no hubo algún medicamento en la farmacia, podrán acudir a módulos de Trato Digno para ser apoyados, "y ahí se les resolverán los problemas”
Durante años, la sociedad nos enseñó que el cuerpo “ideal” debía ser suave, lampiño y perfectamente pulido. Pero, ¿en serio el vello corporal es algo que se debe eliminar… o es hora de verlo como un símbolo de autenticidad y deseo natural?