CIUDAD DE MÉXICO.- Hace unos días, E.J. Dickson colaborador de la revista Rolling Sotone se estaba desplazando por TikTok y vio uno con Olivia Benson, la amada estrella de la Ley y el Orden: SVU interpretada por Mariska Hargitay . El TikTok tiene el título “#cuando digo ACAB”, y el audio es de “Big Girls Don’t Cry” de Fergie. “Espero que lo sepas, espero que sepas / que esto no tiene nada que ver contigo”, la mujer en los labios sincronizados de TikTok, como si se doliera de mencionar a Olivia Benson y el sentimiento anti-policía en el mismo aliento.
En su reportaje para la revista Rollling Stone, señala que en las redes sociales, donde eliminar y abolir la policía se ha convertido en un grito de guerra omnipresente, también reina un sentimiento similar. “El único policía que respeto es Olivia Benson”, se lee en un tuit . “NO TODAS LAS PERSONAS … tienes razón, Olivia Benson de SVU NUNCA lo haría”, dice otro. Incluso como policías ficticios que van desde The Wire ‘s Det. Bunk Moreland a Chase de la Patrulla Canina vienen bajo el microscopio, Olivia Benson está en otra clase por completo. Ella es la minoría, la exención , el caso especial. Ella y ella sola, se acepta generalmente, se le permite vestirse con el manto de Good Cop
Si hubiera una patrona de las mujeres liberales, Olivia Benson lo sería, en la medida en que Taylor Swift (un tótem para la feminidad blanca, si alguna vez hubo una) nombró a uno de sus gatos después de ella . Y en gran medida, esto tiene sentido. Durante 21 temporadas, Olivia Benson se ha desempeñado como la Buena Policía por excelencia, la encarnación de todas las cualidades que deseamos que tengan las figuras de la aplicación de la ley: es dura pero justa, vulnerable pero con ojos feroces, muestra constante compasión por los sobrevivientes y no proporciona nada abusadores
Ella siempre lucha y cree en las víctimas, un marcado contraste con los oficiales de la ley de la vida real, cuyo historial de condenar a delincuentes sexuales es abismal . El hecho de que, en la vida real, Hargitay ha utilizado su plataforma para abogar por eliminar la acumulación de kits de violaciónsolo se suma a la buena fe del personaje. Olivia es una guerrera de la justicia social en el sentido más sincero y no peyorativo, una agente de la ley que no está motivada por cuotas o impulsos de intimidación en la escuela secundaria, sino un sincero deseo de hacer lo correcto por los sobrevivientes en todo momento. Solo un demonio, un sociópata o el presidente de los Estados Unidos tendrían problemas con ella. Ella es, según todos los estándares y medidas, increíble.
Entre algunos espectadores (particularmente sobrevivientes de violencia sexual ), siempre ha habido un entendimiento tácito de que esto es pura fantasía, y esa es parte de la razón por la cual el programa es tan popular: presenta una versión alternativa de la realidad donde el sistema de justicia funciona. como se supone que debe hacerlo, y ver eso puede ser curativo. Aceptar que esto es pura fantasía también permite a las personas pasar por alto algunos de los aspectos más problemáticos del programa, como que la mayoría de las víctimas son mujeres blancas jóvenes, su combinación de tráfico sexual con trabajo sexual consensuado, su transfobia desenfrenada y el hecho que Elliot Stabler, el ideal platónico de un Bad Cop emocionalmente desequilibrado y físicamente abusivo, es interpretado por un hombre tan ardiente y carismático que debería ser ilegal.
Pero no todos los que miran Ley y orden: SVU interactúa con él en esos términos. Un número no insignificante de oficiales de policía ha acreditado al programa con su decisión de ingresar a la policía, y es seguro asumir que un número aún mayor de espectadores mira el programa y cree que los oficiales de policía como Olivia Benson están fundamentalmente del lado de la policía. vulnerables y privados de sus derechos. Y este tropo tiene implicaciones significativas en la vida real: según un informe de Color of Change (que presenta una captura de pantalla de SVU en la portada), la serie de crímenes “convierte a los héroes en personas que violan nuestros derechos” y “no representan el realidad, causas o consecuencias de [disparidades raciales en el sistema de justicia penal] con precisión “.
Las protestas contra la brutalidad policial han provocado una conversación necesaria sobre la leonización de los policías en la cultura popular, y cómo tales tropos nos condicionan para ver a los oficiales de policía como una fuerza para el bien, incluso cuando hay suficientes pruebas de lo contrario en la vida real. Ley y orden: el corredor de espectáculos SVU Warren Leight mismo intervino en esto en un podcast de Hollywood Reporter , diciendo: “La gente mira los programas para ver héroes. Tienes la responsabilidad de al menos representar la realidad, tan cerca de la realidad como puedas “. Y estas discusiones han culminado en un cambio en la vida real: al menos dos reality shows con oficiales de policía han sido cancelados después de las protestas, y LEGO rechazó una campaña de marketing para su último set de juguetes para oficiales de policía. Algunos productores, comoTom Scharpling de Monk, incluso ha emitido una especie de culpas, tuiteando que aquellos que han trabajado en series que representan a los policías como “tontos adorables … han contribuido a la mayor aceptación de que los policías son implícitamente los buenos”.
Es seguro asumir que, al menos durante un tiempo, los creadores de cultura serán cautelosos al representar a los agentes de policía con una luz positiva, y eso dará como resultado algunos cambios muy necesarios en las salas de escritores y sesiones de lluvia de ideas en el estudio. el país.
Pero Olivia Benson no cambiará, no fundamentalmente, porque nadie quiere que Olivia Benson cambie. Probablemente no la veremos haciendo un esfuerzo para contratar más policías de color. Probablemente no veremos a George Floyd incorporado en las líneas de la trama de otra manera que no sea una forma superficial, arrancada de los titulares. Probablemente no vamos a ver que la lleven a una tarea frente a una junta de revisión interna por supervisar a un policía que maltrata a un sospechoso negro. Tales cambios van en contra del paradigma que gobierna el programa, que como dice Leight, es “cómo se debe manejar la justicia”, incluso si esa es la realidad muy rara vez.
No importa cuán tenso esté el papel de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en la imaginación cultural, no importa cuán arraigada esté en un sistema que perpetúa el racismo, la misoginia y la brutalidad, nadie quiere ver a Olivia Benson como algo más que un héroe . Necesitamos creer que el sistema no está totalmente roto. Necesitamos creer que los policías no son totalmente irredimibles. Tenemos que creer que algunos policías pueden ser buenos porque Olivia Benson es buena, incluso si mantenerla como la excepción a la regla que perpetúa la línea de pensamiento de #notallcops que lleva a algunas personas a asentir cuando Fox News demoniza a los manifestantes. en primer lugar.
AM.MX/fm
