Guillermo Fárber
Lo perfecto es aburrido; lo humano es hermoso.
BOMBITAS
Encendida protesta de un liberal ofendido: “¿Exijo que también a mí me toque una de esas bombitas que no explotan pero subrayan el prestigio del destinatario. ¿O qué tienen Obama, Hillary, Soros, Wasserman, Watters, Brennan, CNN y De Niro, que no tenga yo?”
“GÉNEROS”
Como los dos sexos ya son 72 “géneros” (más los que se acumulen esta semana), supongo que no puede hablarse más de “relaciones sexuales” sino de “relaciones generales”. Digo, para irse a la segura con el idioma políticamente correcto.
¿CARAVANA?
El sustantivo correcto de la marcha de indocumentados-ilegales sobre varios puntos de la frontera con EU, que convergerán en Tijuana, no es propiamente una “caravana”, cuyas 7 acepciones que da la Madre Academia son: Grupo o comitiva de personas que, en cabalgaduras o vehículos, viajan o se desplazan unos tras otros. Grupo de animales herbívoros que se desplazan formando fila. Hilera o conjunto de hileras de vehículos que, por dificultades en la carretera, avanzan lentamente y a veces con frecuentes retenciones. Vehículo acondicionado para hacer vida en él, remolcado por un automóvil. En las órdenes militares de San Juan o de Malta, cada una de las primeras campañas que hacían los caballeros persiguiendo a infieles o defendiéndose de ellos. México: Reverencia (inclinación en señal de respeto). No, no se puede llamar “caravana” a esa extraña y carísima (CARISISISÍMA) marcha organizada con varias cabezas y una agenda secreta. Los nacionalistas gringos la llaman “ejército de invasión” (infestado de delincuentes de la mara M-13 y de yijadistas encubiertos), lo que quizá tampoco sea una designación adecuada. En fin, otra manifestación del odio mutuo que alimenta las amenazas de guerra (in)civil entre republicanos y demócratas, nacionalistas y globalistas, populistas y revolucionarios. Se calcula en cien millones de dólares nada más para pagar el procesamiento administrativo migratorio. Súmale los costos de alimentar, albergar, transportar, atender sus emergencias médicas, higiénicas, etc, de esas multitudes, y te vas escalando en decenas de millones por semana. ¿Quién paga tanto dinero? Los trumpistas dicen que el patrocinador es George Soros. Puede ser o puede no ser. Pero alguien está poniendo el dinero, mucho dinero.
YOGUI BERRA
La nota nos dice quién fue el máximo divulgador de la frase “esto no se acaba hasta que se acaba”, que yo recuerdo como buen originario de un ambiente beisbolero (Mahatlán, 1951-1965). “El legendario exreceptor y miembro del Salón de la Fama del béisbol profesional de las Grandes Ligas, Yogi Berra, falleció en su casa de Nueva Jersey, a la edad de 90 años, por causas naturales. ‘Aunque lloramos la pérdida de nuestro padre, abuelo y bisabuelo, sabemos que está en paz con Mamá’, manifestó la familia de Berra. ‘Celebramos su trayectoria en la vida, y damos gracias porque significara tanto para muchas personas. En verdad se le extrañará’. Berra, conocido tanto por sus confusiones lingüísticas como por su récord de 10 títulos de las Series Mundiales con los Yanquis, se convirtió en un verdadero ícono no sólo del béisbol sino de todo el deporte profesional en Estados Unidos. El miembro del salón de la fama, de poca estatura y con un rostro amable, Berra fue un yanqui legendario que ayudó a su equipo a llegar a 14 Series Mundiales durante sus 18 temporadas con los Bombarderos del Bronx. Berra disputó más partidos de las Series Mundiales que ningún otro pelotero de las mayores, y fue nombrado en tres ocasiones como MVP de la Liga Americana. Sin embargo, su nombre aparece casi tantas veces en el libro Bartlett’s Famous Quotations por sus frases, como lo hizo en los libros de récords del béisbol. ‘El juego no se acaba hasta que se acaba’ es una de sus ocho frases incluidas en el texto y que más fama le dieron. Berra jugó para los Yanquis entre 1949 y 1965. Entre sus compañeros estuvieron miembros del Salón de la Fama como los también legendarios Joe DiMaggio, Mickey Mantle y Whitey Ford.”