CIUDAD DE MÉXICO, 19 de julio (AlMomentoMX).- Los efectos de una de las pruebas deportivas más exigentes del mundo quedaron evidenciadas en una foto que publicó el ciclista polaco Pawel Poljanski en su cuenta de Instagram.
“Después de 16 etapas, creo que mis piernas lucen algo cansadas”, fue la frase que el integrante del equipo Bora acompañó la imagen de sus piernas.
El contraste queda aún más evidenciado si se compara esa foto con una parecida que posteó el polaco en 2016 en sus vacaciones en Italia antes de participar en el Giro de Italia.
Este corredor – que se encuentra en el puesto 75 de la clasificación general- retrató uno de los efectos más evidentes del ejercicio en el cuerpo cuando se practica durante condiciones de calor. Un efecto fácilmente notable incluso en aquellos que practican de vez en cuando yoga o tenis.
El caso de Poljanski resultaba extremo y excepcional porque él tiene mucha menos grasa corporal que la mayoría de deportistas aficionados lo cual hace que sus venas se vean aún más prominentes, pero además los ciclistas de elite experimentan casi el doble de fluido sanguíneo en sus piernas que el que puede tener un ciclista recreacional.
Durante el ejercicio, en condiciones de mucho calor, el cuerpo aumenta el riego sanguíneo porque es necesario que las fibras de los músculos reciban más nutrientes, esto hace que el caudal de las arterias aumente y en tanto que las arterias se inunden de sangre de circulación rápida y luzcan hinchadas.
De acuerdo con Michele Olson, profesor de ciencias del ejercicio de Auburn University Montgomery en Alabama, “este no es un signo de deshidratación, es un signo normal y de hecho es bueno que ocurra durante y después del ejercicio”.
Poljanski no es el primero en evidenciar los efectos de pedalear y pedalear por millas sin tregua. Pieter Serry y Bartosz Huzarski ya habían hecho que el mundo fuera testigo del estado de sus piernas después de una carrera en el Tour de Francia.
AM.MX/dsc