Claudia Rodríguez
En la sesión de apertura de los trabajos de la sexagésima cuarta (LXIV) Legislatura del Congreso de la Unión, tal vez a los legisladores priistas pudo haberles parecido irrelevante el señalamiento del diputado del Partido del Trabajo, Gerardo Fernández Noroña, respecto a que el Presidente Enrique Peña Nieto debió haber asistido al Congreso General para hacer entrega de su sexto y último Informe de Gobierno; aun cuando el artículo 69 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ya permite la entrega del mismo de manera escrita, debido a los sucesos pasados a la presencia del mandatario federal, en la Cámara de Diputados.
Fue así, como Peña Nieto desdibujado incluso en el mismo Poder Legislativo y apenas enunciado por puro protocolo por sus correligionarios, fue el gran ausente de la vida política del país, el pasado primero de septiembre.
Tocó a la diputada Claudia Ruiz Massieu, sacar la cara por los priistas apaleados el primero de julio en las urnas, y desde entonces, una y otra vez.
Durante el posicionamiento de la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI), con motivo de la apertura del primer periodo ordinario de sesiones del primer año de ejercicio de la LXIV Legislatura, la legisladora –y dirigente nacional de su partido político—al señalar que el Revolucionario Institucional tiene 90 años de historia, resintió la primera gran desaprobación de la mayoría de los parlamentarios, la cual le impidió en continuas ocasiones, proseguir con su posición, y requirió de pedir al presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados; Porfirio Muñoz Ledo, su ayuda para poner orden al Pleno.
La verdad, es que la legisladora del PRI se ahogaba cada vez que avanzaba en su posicionamiento y la cara se le encendió cuando ella en tribuna, desde las curules los legisladores ahora de mayoría, le contaron del 1 al 43, en reclamo a la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.
La priista y diputada Ruiz Massieu, se sintió sola; sin defensa ni apoyo, y así será para ellos, tres largos años en el Congreso de la Unión y en la Administración Federal.
Acta Divina…Desde la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, la diputada del PRI, Claudia Ruiz Massieu, señaló que los millones de mexicanos que les dieron a los priistas su confianza, estarán bien representados, asegurando que su grupo parlamentario no es mercenario de la política y que no es de los que cambia de lealtades, proyecto e ideología tan pronto como el poder cambia de manos.
Para advertir… Pero sufriendo el pisoteo de ser minoría como ellos marcaron y hasta acordaron cuando ellos eran mayoría.