Salvador Flores Llamas
Mikel Arriola, candidato del PRI al gobierno del DF, tiene la mira puesta en sus oponentes Claudia Sheinbam, de Morena, y Alejandra Barrales, de Por México al Frente.
Acusó penalmente a ambas: a Barrales Magdaleno por defraudación fiscal y enriquecimiento inexplicable y a Sheinbaum Pardo porque como secretaria del Medio Ambiente del DF, adjudicó sin licitar los contratos de los segundos pisos, cuyos precios se dispararon de 2,200 a 5,250 millones y, con López Obrador, ordenó encubrir estas operaciones hasta 2024.
Todo indica que Mikel emprendió una batalla en serio para ganar la Jefatura de gobierno de la CDMX, no como sus antecesores Alfredo del Mazo González (en 1997) Jesús Silva Herzog Flores (en 2000) y Beatriz Paredes Rangel (en 2006 y 2012), que sólo hicieron campañas testimoniales y se dieron por derrotados desde el inicio.
Arriola Peñalosa se pronunció contra el aborto, las uniones gay, la adopción de niños por éstas y legalizar la marihuana. Eso le atrajo muchas simpatías, pues gran mayoría de la población está de acuerdo con él, pese a que la propaganda mediática izquierdista hace parecer lo contrario.
Anunció, por otra parte, que construirá 15 kilómetros de Metro por año, en coordinación con el Gobierno Federal, en favor de los 5 millones de usuarios que diario lo utilizan; pues en 20 años los malos gobiernos de izquierda deterioraron la infraestructura urbana por no invertir y desviar los recursos públicos a otros fines por corrupción.
Esos partidos contribuyeron a empobrecer a los capitalinos y al descuidar los servicios públicos se deterioró el nivel de vida. Mikel propone abatir pobreza, corrupción, impunidad, desigualdad e inseguridad sociales, para enfilar al país a estadios superiores de progreso en favor de todos los mexicanos.
Por eso el ex director general del Seguro Social se comprometió, entre otras cosas, a promover que los alumnos de preparatoria y profesional tengan transporte público gratuito y se preparen mejor, para impulsar el desarrollo de México y puedan satisfacer sus aspiraciones familiares y profesionales.
Por otra parte, Mikel acusó a Barrales de tener un departamento en Miami, que vale 20 millones de pesos; una residencia en Lomas de Chapultepec de 41.5 millones y un departamento en Acapulco de 12 millones. Pero ella dice que los tres sólo valen 35 millones en total, lo que implica un fraude fiscal por 22 millones, como mínimo.
Alejandra tiene además un edificio en Ixtacalco, valuado en 27 millones, que no declaró públicamente, por lo que demandó se investigue su patrimonio.
El también ex comisionado federal de la Cofepris prueba sus dichos con documentos del Registro Público de la Propiedad, y sostiene que la exdirigente nacional del PRD aprovechó sus puestos públicos para aumentar su patrimonio tres mil por ciento, en los últimos seis años.
El prospecto priista presentó una denuncia penal ante la PGJ contra Claudia Sheinbaum porque permitió, como Delegada en Tlalpana, que el Colegio Rebsamen utilizara el edificio que colapsó el 19/8, donde murieron 12 niños y 9 adultos, cuando el gobierno citadino ya se lo había prohibido.
También la denunció ante la Contraloría Capitalina, porque entre 2015-17, cobró en el Conacyt y la UNAM como investigadora de tiempo completo, ya como Delegada en Tlalpan; lo que prohíbe el Estatuto de Gobierno del DF.
De la UNAM recibió 900 mil pesos, a razón de 75 mil mensuales, y del Conacyt más de 300 mil.
Arriola explicó que dio a conocer tan valiosa información sobre ambas candidatas para mostrar a la ciudadanía que no son aptas para gobernar la capital del país, porque violaron la ley en varias ocasiones, y le servirá para cuestionarlas en los debates que prepara el Instituto Electoral de la CDMX, de los que no podrán sustraerse.
Lo que revela, además, su voracidad para aprovechar los puestos públicos, a los que, al parecer, llegan no para servir al pueblo, sino para servirse ellas mismas.
Al surgir sobre Sheinbaum las denuncias por su complicidad en el desastre del Rebsamen, Amlo le ordenó no hacer más declaraciones al respecto; por eso va a pocos mítines para que no la increpen.
Por otro lado, el párroco de la iglesia del Sagrado Corazón en el Ajusco Medio, la acusó de haber mandado profanar y destruir ese templo para apropiarse del terreno, arguyendo que es del gobierno.
Ante la indignación de la gente ella se disculpó ante el cardenal Norberto Rivera y le prometió aportar dinero para la reconstrucción, si le permitían disponer de parte de la superficie para crear un centro de artes y oficios. Pero incumplió ambas cosas.
Se corrió la voz entre los vecinos que Claudia planeaba vender el terreno para erigir un centro comercial, lo que no pudo consumar por la indignación de la población.
Pese a ello, esta sacrílega quiere gobernar a la capital de la República. No vaya a ocurrírsele poner a remate la Basílica de Guadalupe.
Nota.– Se colige que la capital del país, dominada por años por el PRD, tendrá unos comicios muy reñidos entre estos tres candidatos. Competirán también Purificación Carpinteyro, del PANAL; Marco Rascón (ex Superbarrio) del Partido Humanista (que perdió su registro nacional), Mariano Boy, del PVEM, y Lorena Osornio, candidata independiente.
@chavafloresll
