La fabricación y producción de ropa y alimentos tienen un costo de agua virtual, por ejemplo, una camiseta requiere 2,700 litros de agua y un kilo de carne 15,000 litros. Durante el último trimestre del año, el consumo aumenta y con él crece el impacto hídrico; se compran todo tipo de productos y se olvida la cantidad de agua que se requirió para su elaboración. Somos PURA sugiere optar por compras conscientes, como productos de segunda mano o elaborados con materiales sostenibles, para reducir la huella hídrica. Iniciativas de impacto internacional como Water Positive buscan restaurar el agua utilizada y promueven un consumo responsable, esencial para preservar este recurso.