sábado, noviembre 30, 2024

40 años del trabajo artístico de Gogy Farías

Por: Valeria García Salgado 

 

CIUDAD DE MÉXICO.– Mujeres, niños, bustos, figuras religiosas, insectos, raíces, músicos, parejas y hasta árboles, son algunas de las figuras que la escultora mexicana Gogy Farías ha diseñado y moldeado para el mundo en sus 40 años de carrera como artista.

Gogy se entregó profesionalmente al arte desde 1978. A temprana edad, su entorno de juguetes, ropa, colores, formas y tamaños cautivaron su atención hasta convertirla en artista plástica y escultora.

Estudios y preparación 

Estudió Artes Plásticas en la Universidad Iberoamericana y en el intermedio de su carrera aplicó también para la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, escuela perteneciente al Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), organismo cultural más importante del gobierno mexicano para desarrollar la educación y la investigación artística.

En realidad, su primer acercamiento con las artes plásticas fue la pintura. Gogy se desenvolvió en esta rama por las enseñanzas de su maestro Edgardo Coghlan, pintor mexicano especialista en acuarelas de paisajes y personas mexicanas.

Fue de los cuadros de mercaditos que pintaba su maestro que Gogy se vio influenciada por el contexto mexicano, su gente, sus costumbres, su comida y su etnia. Así, en 2014 la escultora presentó una colección de poco más de 30 obras en honor a Amalia Hernández, una de las bailarinas mexicanas de ballet folklórico más importantes.

Antes que ser escultora es mexicana, es mujer

Ha sido madre, esposa, hija, amiga y compañera, pero incluso antes de todos esos sustantivos es un ser humano y uno al que el alma, los sentimientos, el entorno y la existencia le resultan esenciales para la felicidad de cualquier persona.

Es por ello que todo el trabajo de Gogy ha estado influido por su sensibilidad ante el mundo que la rodea.

“Si eres indiferente a lo que estás viendo o estás pensando en otras cosas no puedes penetrar en la imagen. Saber ver es vivir con tus sentidos el momento. Mi fuente de inspiración es la vida”, contó Gogy para entrevista con Al Momento MX.

Sus obras en el mundo 

Su primer éxito profesional fue en 1980 cuando Gogy decidió participar en un proyecto coordinado por el entonces Regente del Distrito Federal, el profesor Carlos Hank González.

Luego de presentar algunos bocetos propios, el comité finalmente seleccionó dos de sus obras, El Gobernante y La Familia, esculturas que se colocaron en el Jardín Escultórico del Bosque de Chapultepec y que a la fecha siguen ahí.

El Gobernante es la obra más importante de su carrera artística; se trata de una escultura de bronce que muestra a un caballo de tres cabezas con partes de su cuerpo huecas y un jinete al mando.

La obra, según palabras de la escultora, está basada en un concepto de composición muy abstracto.

“Las tres cabezas representan la mente humana, una es el ello, el subconsciente; otra es el ego, el consciente y la última el súper ego que es la mente; el jinete es la razón, la luz divina y es quien maneja las riendas de la vida”.

Rompiendo el Círculo es otra de sus obras más importante. Esta escultura de bronce está ubicada desde el 2006 en la Unidad Profesional “Lázaro Cárdenas del Instituto Politécnico Nacional (IPN), mejor conocido como El Casco de Santo Tomas, y es la representación del ser humano terminando con los atavismos de la vida y con las cosas que no te permiten continuar.

Esta obra también fue pintada sobre papel Guarro en 1986 y por el trabajo de grabado Gogy recibió el Foire International de l’Estampe á Paris, premio otorgado por el FIEST 86.

Memorias y sueños en sus esculturas 

Todo el trabajo de Gogy Farías representa su vida, sus memorias, sus sueños, su país y el amor que siente por la belleza humana expresados por medio de sus manos. 

Cada una de sus obras tiene nombre y registro, además de la esencia del alma humana en todas sus manifestaciones. 

En su obra Perfil Mexicano nos muestra el amor de madre, la devoción, campesinos, indígenas, mexicanos trabajadores, vestimentas típicas, músicos y artesanos.

“Una mujer vendiendo flores en la puerta de mi casa hace 40 años me inspiró a hacer una marchanta con su rebosito en su cabeza y su morral atrás en la espalda y le hice su escultura”.

Entre las piezas más importantes de la colección destacan para la artista  La vendedora de sandía, la vendedora de flores, las faldas de mariposa y el son de la negra. 

Para Gogy esta fue una forma de preservar la identidad de su país, “México es el amor de mi vida. Me siento muy orgullosa de ser mexicana”.

40 años del arte de Gogy Farías 

Este 2018 Gogy Farías cumple 40 años como artista profesional, aunque reconoce que aún hay muchos jóvenes que no cuentan con las oportunidades para incursionar en el mundo del arte por la falta de oportunidades que hay para los artistas.

Por eso, Gogy ha pensado en la posibilidad de crear un museo en Cuernavaca, Morelos, para dar mayores oportunidades a nuevos artistas. 

Aún después de 40 años de trabajo Gogy no olvida los inicios de su carrera profesional ni los objetivos artísticos con los que comenzó, sin embargo, ella está orgullosa por las fronteras que su arte ha logrado atravesar y los lugares y personas que ha conocido en su trayectoria.

“Cada momento lo vivo intensamente […] y nunca me imaginé que iba a superar mis expectativas de amor al arte. Realizar un pequeño torso, una pequeña figura para mí era grandioso, pintar un cuadro que me gustara era superlativo, nunca me imaginé que me contrataran para hacer una escultura para Chapultepec y mucho menos hacer esculturas para Juan Pablo ll”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Anécdotas para leer 

Para este 40 aniversario Gogy planea una exposición y la publicación de un libro que contará anécdotas y narraciones de su vida, además de memorias de su familia, su matrimonio y su trabajo. 

Las Horas del Sol, Perfil Mexicano, La Familia, Del Caos al Cosmos e Insectos son algunas de las exposiciones que Gogy ha presentado en su trayectoria como pintora y escultora.

Actualmente tiene una exposición permanente en Chicago, Estados Unidos y otra en San Miguel de Allende, en el Estado de Hidalgo, México.

A pesar de los proyectos que por diversas circunstancias no logró concretar, los sueños de Gogy siguen construyéndose con cada obra, con cada material, cada técnica empleada y cada hora dedicada a esculpir y crear.

Mientras las manos de Gogy Farías aún puedan esculpir y su mente aún pueda representar físicamente todas las historias que le quedan por contar; su arte y trabajo continuarán existiendo.

 

AM.MX/vgs

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