jueves, abril 25, 2024

Amenazan de muerte a Javier Sicilia y al exrector de la UAEM

CIUDAD DE MÉXICO, 12 de diciembre (AlMomentoMX).- El poeta y activista Javier Sicilia denunció que él, el exrector de la Universidad Autónoma del estado (UAEM), Jesús Alejandro Vera Jiménez, y la esposa de éste, María Elena Ávila Guerrero, fueron amenazados de muerte .

Foto: Proceso

“De parte del gobernador, a ti, a Alejandro (Vera) y a su esposa, se los va a cargar la chingada”, fue el mensaje que recibió Sicilia vía telefónica.

En un mensaje a medios, el dirigente del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad  informó que otros miembros del Movimiento y de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) también han sido amenazados de muerte, y que a pesar de que han presentado denuncias, la Fiscalía del estado no les otorga protección.

Sicilia indicó que tras escuchar las amenazas, de inmediato llamó a Roberto Campa, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, y al propio gobernador Graco Ramírez, quien respondió: “No, yo no fui, yo no amenazo”.

El poeta hizo un enérgico llamado al Gobernador y a su Fiscalía– a quien hizo responsables de cualquier cosa que les llegue a pasar– para que investigue dichas llamadas.

Finalmente, Sicilia señaló que las medidas cautelares son ineficientes, pues no garantizan la seguridad de los amenazadas. “No puedes, ni como ciudadano no como activista, vivir con miedo”, enfatizó.

Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, colaboró de cerca en la administración de Vera Jiménez al frente de la UAEM, que concluyó el pasado domingo 3. Durante su gestión, de casi seis años, Sicilia y Vera impusieron una agenda social y en defensa de los derechos humanos.

Desde esa trinchera, ambos establecieron una lucha a favor de los pueblos y comunidades de Morelos que se oponen a la imposición de megaproyectos que afectan el tejido social, el patrimonio cultural y el ambiental del estado, y también denunciaron el hallazgo de fosas clandestinas en Tetelcingo y Jojutla, donde la propia Fiscalía de Morelos desapareció cuerpos.

AM.MX/dsc

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