sábado, abril 20, 2024

Tequila, sal y limón

Adrián García Aguirre / Cd. de México

*Así suele tomarse el mexicanísimo destilado.
*Hay que beberlo despacito para aligerar el sabor.
*El procedimiento para tomárselo tiene un origen específico

El tequila es, sin duda, la bebida favorita de los mexicanos, además de ser una de las más demandadas en países extranjeros, como lo demuestra la demanda que tiene en países tan lejanos como Japón, nación en la que se han elaborado réplicas exactas.
El proceso más conocido para tomárselo es tomar un poco de sal, después venga el tequila, el cual se sirve principalmente en un “caballito” de vidrio, y se termina chupando una rodaja de limón para barrer el sabor de alcohol de la boca.
A pesar de ser un procedimiento que nació en México, como lo es el tequila, esta manera de tomárselo es conocida en todo el mundo y tiene una razón: además de que al comerse la sal primero se sala la lengua lo cual realza el sabor del tequila y puede disfrutarse mejor; es decir, que el limón se utiliza para “limpiar el paladar”
La razón por la que se toma con sal y limón específicamente, es que se dice que en México hace muchos años en la frontera del norte de la República se comercializaba tequila de baja calidad.
Este destilado provenía de alcoholes agrícolas y no del agave azul, por lo que tenía un sabor algo desagradable, y para poder disfrutarlo lo más que se pudiera, los campesinos lo acompañaban con limón y sal, de esta manera se facilitaba el trago.
En otras palabras, la sal y el limón pueden ayudar a facilitar el trago.
Algunas personas afirman que esta manera de tomarlo se hizo popular durante la época del cine de oro mexicano, pues en muchos filmes de esos años se puede observar a grandes íconos tomando el destilado de esta forma.
Díganlo si no Jorge Negrete, Pedro Infante, Pedro Armendáriz o cualquiera otro de nuestros grandes charros, y es que así también el tequila tuvo más reconocimiento internacional, pues la botella de tequila era uno de los compañeros imprescindibles de los actores de esos tiempos de gloria.
Fue en películas pertenecientes de la época de oro del cine como “Así es mi tierra” de 1937; “La Tequilera”, “¡Ay Jalisco, no te rajes!” de 1941; “El ametralladora” de 1943; “Los tres García de 1947, protagonizada por Pedro Infante, Víctor Manuel Mendoza y Abel Salazar, y “La cucaracha” de 1959, por mencionar algunas de las más afamadas.
A pesar de que actualmente se puede tomar en forma de coctel, algunas personas optan por tomar el destilado con sal y limón porque de esta manera se puede aligerar el trago, ya que hay quienes no soportan el sabor de la bebida y así facilita el sabor al tomárselo de un “shot”, como lo hacía Pedro Infante, quien que le dio reflectores al tequila durante esa época dorada.
También hay quienes prefieren tomárselo solo o “derecho” -como lo ingieren los rusos el vodka-, pues consideran que por el proceso tan específico y delicado que se tiene para producirlo y obtener el destilado de agave más puro, mezclarlo con alguna otra bebida o con limón y sal, no es la mejor manera de disfrutarlo.
Hay quienes piensan que México es un país donde se disfrutan mucho las combinaciones de sabores, texturas y colores, y es por esto que disfrutan el tequila en cocteles, por ejemplo el Tequila Fix que lleva jugo de limón, miel líquida, chorritos de Curaçao y un trozo de limón.
También está el Tequila Sunrise que lleva jugo de naranja, jugo de granada, una rodaja de naranja y una cereza entera para decorar, y otro ejemplo es mezclar el tequila, jarabe para endulzar al gusto, jugo de limón y hojas de menta para obtener el llamado Mint Tequila.
Es importante destacar que hay diferentes tipos de tequila; expertos indican que el Plata está enfocado en las notas críticas como la fresa, kiwi, cereza, moras, mandarina y hierbas frescas como perejil o menta, por lo que lo hace ideal para cocteles frescos.
El reposado suele acompañarse con hierbas secas como el romero, la mejorana seca o hierbas finas que hacen destacar sus notas a madera, frutas como la manzana y el durazno son ideales para acompañarlo, pero la mejor recomendación viene de Alama Sánches, una esbelta tequilera que dice que el añejo se sugiere disfrutarlo derecho como aperitivo o digestivo.
“No hay más”, dice la experta bebedora antes de decir …¡Salud!

Artículos relacionados