“Existen deportes que despiertan grandes pasiones entre quienes los practican, así como en sus espectadores, sin embargo, la narrativa y el lenguaje que se utiliza tanto en las canchas como en las gradas no debe incitar a la violencia. No debemos permitir más actos de barbarie como lo ocurrido en el estadio La Corregidora de Querétaro”, sentenció.
La senadora consideró que estas reformas impulsarán un cambio más civilizado sin abusos ni discriminación en la cultura laboral de México. "Este dictamen contempla la reparación integral del daño. Esto implica adoptar medidas de restitución, rehabilitación, compensación, satisfacción y garantías de no repetición”, explicó.
Éstos deberán garantizar en todo momento la seguridad y confidencialidad de los datos personales y formarán parte de los modelos de atención, prevención y sanción destinados a proteger a las víctimas de este tipo de violencia.
Su obra, recalcó, “en buena medida es un espejo de la historia contemporánea de la Universidad, desde los movimientos estudiantiles de 1968 hasta las huelgas de finales de los 90. Su pluma dibujó el panorama de la vida estudiantil y académica, que muestra a la UNAM como un microcosmos de la sociedad mexicana”.