Los correos electrónicos se caracterizaban por una técnica inusual y altamente personalizada: incrustar un logotipo del sitio web del objetivo en la propia página de phishing.
"Vino un grupo de estudiantes y maestros (de Ayotzinapa), que seguramente ni son maestros y estudiantes, que vinieron a lanzar bombas a Palacio, y se fueron, con el fin de provocar, y acusarnos de represores, todo esto en vísperas de las elecciones", dijo el mandatario.