El trastorno puede tener efectos severos, como taquicardia

CIUDAD DE MÉXICO, 30 de junio (Al Momento Noticias).- El 5% de la población infantil en el país tiene problemas colaterales a la apnea del sueño, como irritabilidad, hiperactividad, mal aprovechamiento escolar y enuresis (orinarse en la cama), informó el neumólogo Rubén Santoyo Ayala.
Explicó que en un niño la apnea puede tener efectos severos, como taquicardia (aumento excesivo de la frecuencia cardiaca), y/o bradicardia (disminución de los latidos del corazón), hipertensión arterial e incluso arritmias, por lo que es necesario hacer el diagnótico oportuno para detectar el factor que deriva el trastorno, como puede ser la obesidad.
Precisó que la apnea del sueño es el cese momentáneo de la respiración mientras se duerme, uno de los síntomas son roncar por la noche, y al despertar el infante puede preentar además cianosis (amoratamiento de labios o dedos), amígdalas grandes y patrones alterados de la respiración.
El especialista adscrito al Seguro Social de Jalisco señaló que la población pediátrica más afectada por este trastorno es la de entre dos y cinco años de edad. En México hasta 5% de infantes presenta este problema asociado a factores como obesidad, sobrepeso y malformaciones o alteraciones de la cavidad oral (úvula, paladar o faringe), además de hipertrofia de las amígdalas o incluso tumoraciones de la garganta.
Dijo que el ronquido es una de las características de este trastorno, por lo que entre 9 por ciento y 12 por ciento de niños roncan, y de éstos hasta 10 por ciento padece apnea del sueño.
“Si al acostarlo, el niño tarda menos de cinco minutos en quedarse dormido, esto es latencia y si además tiene sobrepeso u obesidad hay una gran sospecha de que sea apnea, lo normal es que un infante se quede dormido después de cinco o 10 minutos de haber llegado a la cama”, afirmó.
Indicó que para diagnosticar apnea en el niño, se debe identificar el hecho de una interrupción de la respiración de entre seis y 10 segundos en el lapso de una hora. La apnea del sueño también es frecuente en niños que presentan Síndrome de Down o de Prader Willi, además de los que nacen con labio y paladar hendido.
Subrayó que en muchos casos una opción para el tratamiento de apnea en niños es la extirpación de las amígdalas, no obstante en ciertos pacientes puede haber reincidencia. Sin embargo, hasta 80 por ciento de pequeños, el problema se resuelve con el control y estabilización del peso corporal y con la utilización del instrumento especializado denominado CPAP (20 por ciento de los pacientes), que es una mascarilla para dormir y brinda un flujo de aire para tener mayor oxigenación.
Agregó que el trastorno afecta en diferentes etapas de la vida, en la escolar hay ausentismo y bajo rendimiento, mientras que en etapa de recién nacidos y lactancia puede derivar en la llamada muerte de cuna, debido a que el acostarlos de forma inadecuada contribuye a obstaculizar el paso del aire por el trayecto buco-nasal.
AMN.MX/bbf