Adrián García Aguirre / Palenque, Chiapas
* Problemas no se resuelven con pasos de fauna.
* Forma de mitigar el impacto en los animales.
* Opinión de Job Morales García, presidente de BioFutura.
* La Alianza Nacional para la Conservación del Jaguar.
* Poblaciones de felinos distribuidas en cinco entidades.
Job Morales García, experto en jaguares, revela que el Fondo Nacional de Fomento del Turismo (Fonatur) encargado del proyecto del Tren Maya, no había contemplado a los felinos en un inicio, pero hubo un diálogo entre el gobierno y la Alianza para la Conservación del Jaguar (ANCJ).
Gerardo Ceballos González, integrante de ésta y otros grupos defensores del medio ambiente, como sin fuese operador empresarial propuso la idea de crear lo que llamaron pasos de fauna silvestre.
Son estructuras de cruce de vida silvestre que se supone reducirán las colisiones de animales y vehículos, que permiten el paso seguro de los animales y promueven la conectividad del hábitat.
El plan del gobierno para minimizar la segmentación de los ecosistemas y conectar el hábitat incluye pasos de fauna silvestre que, admiten los expertos, no serán solución para proteger a los animales.
Durante el Congreso Internacional de Negocios de la Industria Ferroviaria (Expo Rail) de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF), en febrero de 2020, se informó que el Tren Maya tendrá 63 pasos de fauna grande y dos mil metros de pasos de fauna para pequeños vertebrados en los primeros tres tramos.
En mayo y julio de 2020, Fonatur adjudicó dos contratos por 19 millones de pesos para estudios para identificar el número de pasos de fauna necesarios a lo largo de la ruta del Tren Maya en las fases uno y dos del proyecto, su ubicación precisa y características específicas.
Ello de acuerdo con los documentos registrados en la plataforma de compras gubernamentales CompraNet.
El estudio de la primera fase no está publicado en la Plataforma Nacional de Transparencia y el de la segunda fase solo está disponible a través de solicitudes de acceso a la información si se pide copia del documento, además de que ningún estudio aparece en la página oficial del proyecto.
Se localizaron cuarenta pasos de fauna para los primeros tres tramos del Tren Maya mencionados en la Manifestación de Impacto Ambiental de la fase uno del proyecto entregada a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) el 16 de junio de 2020.
Estos pasos de fauna se construirán a lo largo de 631.25 kilómetros, entre ellos habrá pasos inferiores para grandes mamíferos, inferiores específicos para pequeños vertebrados, pasos entre árboles para mamíferos que viven en los árboles y pasos para anfibios.
En opinión contraria, se ha dicho que los pasos de fauna no son suficientes, ya que el jaguar es el felino más grande en América y es de suma importancia para la biología, la cultura e incluso para la filosofía.
Esto, de acuerdo con Jonathan Job Morales García, presidente de BioFutura y miembro de la ACNJ.
El jaguar también es una especie prioritaria para la conservación de acuerdo con la Ley de Vida Silvestre y está considerada como en peligro de extinción bajo la norma que protege a las especies en riesgo en México, la NOM-059-SEMARNAT-2019.
La última vez que la ACNJ contó a los jaguares que habitan en México fue en 2018 y la cifra estimada llegó a cuatro mil 800 ejemplares en todo el país; la mitad de ellos viven en la península, es la población más grande de jaguares en México.
Este animal ha sido el centro de atención al hablar sobre los impactos ambientales del Tren Maya porque está a la cabeza de la cadena alimentaria de los ecosistemas terrestres de selvas húmedas.
El jaguar come pecarí, el pecarí consume otras especies y así sigue la cadena: “Si conservamos la especie del jaguar, como tiene un rango de distribución amplio, podemos conservar a muchas otras especies, podemos garantizar los servicios ambientales como el agua y el oxígeno”, explica Morales García.
¿Cómo afecta el Tren Maya al jaguar? Es una de las decenas de animales en riesgo por el proyecto Tren Maya y no es la única especie vulnerable ni es la más relevante porque algo así no existe, todas son importantes; pero el jaguar ilustra a la perfección la manera en que las vías de los trenes serán una barrera para el movimiento de la fauna.
Sobre su distribución, hay poblaciones de jaguar repartidas a lo largo de los cinco estados por los que atravesará el Tren Maya y, aunque están separadas entre sí, las comunidades de jaguares se mueven de un lugar a otro a través de áreas de vegetación en buen estado de conservación, por lo que todas las poblaciones de jaguar están conectadas entre sí.
De esta forma, la población de jaguar que vive en Guatemala está conectada con la población que habita en la Reserva de la Biosfera de +Calakmul en Campeche, y esta a su vez viaja a través del corredor biológico “Calakmul – Bala’an K’aax” hasta el otro extremo de Campeche, al Área Natural Protegida (ANP) “Laguna de Términos”.
Este recorrido se verá afectado por el Tren Maya: la vía cercada del Tren Maya pasará justo entre la Reserva de la Biosfera de Calakmul y la ANP Laguna de Términos, dejando una barrera entre el hábitat de los jaguares.
La barrera para las poblaciones de jaguares que creará el Tren Maya dicen que será mitigada con pasos de fauna diseñados, de acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental del proyecto para su fase uno.