sábado, abril 20, 2024

SIN LÍNEA: Crimen organizado, hasta la médula en asesinatos de políticos

        José SÁNCHEZ LÓPEZ

 

JAMÁS, en la historia de nuestro país se había vivido una etapa tan insegura, tan violenta, tan mortal.

Si bien no hemos dejado de ser un México violento.

En los anales de la política contemporánea, figura el asesinato del cardenal JUAN JESÚS POSADAS OCAMPO, el lunes 24 de mayo de 1993 a las 15:45 de la tarde, en el estacionamiento del Aeropuerto Internacional de Guadalajara.

El del candidato presidencial por el PRI, LUIS DONALDO COLOSIO MURRIERA, el miércoles 23 de marzo de 1994 a las 07:12, En Lomas Taurinas, Tijuana, Baja California y medio año después, el 28 de septiembre, a las 09.22 horas, el de JOSÉ FRANCISCO RUIZ MASSIEU, al salir del hotel La Fragua, en pleno centro de la Ciudad de México.

En los tres casos se trató de magnicidios y los móviles, aunque nunca han sido lo suficientemente claros, si se manejaron versiones extraoficiales, nunca confirmadas, respecto a ellos.

Respecto al cardenal, una confusión o bien un ajuste de cuentas; en el de COLOSIO, una venganza tras el incendiario discurso del 6 de marzo de 1994: “Yo veo un México con hambre y con sed de justicia. Un México de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla. De mujeres y hombres afligidos por abuso de las autoridades o por su arrogancia” y se presumía que, de llegar a la Presidencia, las cosas cambiarían. No lo dejaron llegar y de ello se culpa, sin que le hay sido comprobado, a CARLOS SALINAS DE GORTARI.

En lo referente a RUIZ MASSIEU, se habla de que el ex gobernador guerrerense llegaría a la Presidencia del Congreso de la Unión y “estorbaría el proyecto salinista”.      

En el abultado expediente del caso, aparecen los nombres de los asesinos materiales, la cantidad que se les pagó, las armas utilizadas, la red de complicidades del diputado tamaulipeco MANUEL MUÑOZ ROCHA que simplemente, desapareció.

Las investigaciones no llegaron más allá.

Tuvieron que transcurrir 16 años más para que otro crimen similar ocurriera, el de RODOLFO TORRE CANTÚ, el 28 de junio de 2010, pero este asesinato dejó en claro que el crimen organizado, el narcotráfico, había tomado participación en la política. Se habló de que un líder del Cártel del Golfo metió las manos

Y a partir de esa fecha, la delincuencia organizada “participa en las contiendas electorales”.

Así, bajo ese negro panorama,  llegamos a las elecciones de 2018, proceso que inició en septiembre de 2017 y a la fecha, ha dejado un saldo de 112 

 

La muerte se metió hasta la médula en el sistema político. Pero la de Fernando Purón, marca la facilidad con la que se puede matar en este país. Un individuo acechó al aspirante, quien salía de un debate en el auditorio de la Universidad Autónoma de Coahuila y en segundos, lo mató de un tiro en la cabeza. Sucedió a menos de una cuadra de la delegación de la PGR y de la Presidencia Municipal. Es momento de condenar la violencia; todos lo hacen. Pero, también de recordar que con Purón suman 112 políticos asesinados en esta campaña. Volvió el México bárbaro. ¿O nunca se fue

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Con asesinato de candidato en Coahuila, suman 112 homicidios políticos

La coalición del PRI ha sido la que más asesinatos ha sufrido, seguido de la coalición del PAN y por último Morena

El homicidio de un candidato a diputado en el norteño estado mexicano de Coahuila, elevó a 112 el número de políticos asesinados en el actual proceso electoral de 2018 en México, según el indicador de violencia política.

Fernando Purón Johnston, candidato del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) a diputado federal por el Distrito 1 de Coahuila, fue asesinado a balazos la noche de este viernes al salir de un debate electoral en Piedras Negras.

El indicador de violencia política México 2018 de la consultora privada Etellekt destacó que con la muerte de Purón suman ya 112 asesinatos y más de 400 agresiones a políticos y candidatos en este proceso electoral que comenzó en septiembre de 2017.

Del total de 112 asesinatos, 28 eran precandidatos y 14 más candidatos a puestos de elección, el resto corresponde a alcaldes, exalcaldes, regidores, militantes, dirigentes, ex regidores, diputados, síndicos y ex síndicos.

En este periodo, otros 127 políticos han recibido amenazas y actos de intimidación, de los cuales, 73 son candidatos y 16 precandidatos.

La consultora precisó que durante el proceso electoral 2018 se han registrado un total de 401 agresiones globales en contra de políticos y candidatos en 31 estados y 263 municipios (más del 10% de los municipios del país).

En el indicador de violencia se han documentado desde intimidaciones y amenazas, ataques a familiares, agresiones con armas de fuego, físicas, asaltos con violencia.

Los estados de Guerrero (23), Oaxaca (19), Puebla (13) y Veracruz (8) son los que registran un mayor número de agresiones, señaló el indicador.

La coalición del PRI con los partidos Verde Ecologistas de México y Nueva Alianza ha sido la más golpeada con 44 asesinatos de políticos.

La coalición de los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC) registra 43 asesinatos y le sigue con 18 aspirantes muertos la alianza de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) con los partidos del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES).

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