CIUDAD DE MÉXICO, 24 de enero (AlmomentoMX).- La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) publicó los Lineamientos para la Operación del Programa Producción para el Bienestar de 2019, esquema con el que el Gobierno de México trabajará para incrementar la producción nacional de granos y contribuir a fortalecer la autosuficiencia alimentaria.
Con este programa se aplicará este año un presupuesto de nueve mil millones de pesos, lo que le permitirá al Gobierno Federal dotar de liquidez y vincular el acceso a servicios a los pequeños y medianos productores, así como contribuir a aumentar la producción sustentable.
De acuerdo con lo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la población objetivo de este Programa son pequeños y medianos productores con predios de hasta 20 hectáreas elegibles inscritos en el padrón del Programa Producción para el Bienestar que cultiven granos básicos (maíz, frijol, trigo panificable y arroz).
El documento detalla que los beneficiarios con predios inscritos en el Directorio PROAGRO Productivo serán los pequeños productores de hasta cinco hectáreas de temporal y hasta 0.2 hectáreas de riego, y en el caso de los medianos, serán los de mayor de cinco hectáreas y hasta 20 de temporal, y de 0.2 y hasta cinco hectáreas de riego.
El cálculo del monto máximo de incentivo se realizará por hectárea o fracción de la superficie elegible del predio, conforme a las cuotas por hectárea siguientes: Pequeño productor, mil 600 pesos, y mediano productor, mil pesos por hectárea.
Para el caso del Programa de Incentivos para Productores de Maíz y Frijol (PIMAF) vigente en 2018 —que cumplan los requisitos aplicables y concluyan la incorporación de sus predios en el padrón del Programa Producción para el Bienestar—, será para pequeños productores de hasta tres hectáreas.
Cabe señalar que, por primera vez, serán incorporados 250 mil productores de maíz y frijol de localidades con población indígena en más de 70 por ciento. La inscripción a este programa será a través del Censo de Bienestar, que es levantado por voluntarios denominados Servidores de la Nación, en coordinación con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.
El cálculo del monto máximo de incentivo para estos productores se realizará por hectárea o fracción de la superficie elegible del predio, conforme a la cuota por hectárea, que es de mil 600 pesos para pequeños productores.
La Unidad Responsable para la incorporación de predios al Programa establecerá esquemas de capacitación y acompañamiento técnico-organizativo dirigido a los productores para facilitarles la adopción de innovaciones tecnológicas, mejorar sus prácticas agrícolas e incrementar sus rendimientos, así como para fortalecer la instrumentación de servicios que ofrece la SADER.
La Unidad Responsable publicará las disposiciones específicas mediante documento denominado Procedimiento Operativo, en donde se establecerán las obligaciones y funciones a cargo de las instancias participantes en la operación del Programa.
El productor debe acreditar la totalidad del uso del incentivo y actualizar sus datos, así como su confirmación de vinculación al Programa, que puede realizarse anticipadamente a la entrega del incentivo y vía sistema informático, conforme lo establecido por la Unidad Responsable.
A efecto de verificar el cumplimiento de las obligaciones a cargo del beneficiario y las instancias participantes en la ejecución del Programa, se llevará a cabo la supervisión de éste en los términos que establezca la SADER, por conducto de la Dirección General de Planeación y Evaluación.
Este apoyo forma parte de los programas que el Gobierno de México puso en marcha y articuló en 25 grandes proyectos estratégicos, en los que la SADER participa con cuatro: Crédito ganadero a la palabra, Precios de Garantía, Producción de fertilizantes y Producción para el Bienestar.
AM.MX/fm