MADRID, ESPAÑA.- La Policía Nacional española, en una operación conjunta con la DEA y con autoridades policiales de Países Bajos, desmantelaron la “oficina” del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en España.
En la operación bautizada como Oyamel, fueron detenidas 20 personas que, presuntamente, se dedicaban a la introducción de grandes cargamentos de cocaína y metanfetamina desde Sudamérica para su posterior distribución en España y otros países europeos.
Los agentes incautaron 1.870 kilos de cocaína, 375 kilos de anfetamina, 275.000 euros en efectivo, criptomonedas por valor de 15.000 dólares, 3 armas cortas de fuego, 15 coches y 14 kilos de plata.
Según informó la Policía Nacional, la investigación comenzó este mismo año (2025) cuando se constató la introducción de cocaína en España oculta en maquinaria industrial de gran tonelaje, aprovechando el entramado empresarial de uno de los principales objetivos españoles al servicio del cártel.
Una vez en territorio español la droga se almacenaba en fincas ubicadas en la sierra de Madrid y en Ávila (Castilla y León), zonas que proporcionaban tanto privacidad como seguridad para la custodia de la misma.
La distribución en España era coordinada desde una finca próxima a La Adrada (Ávila) con ramificaciones en Bilbao y Valencia, empleando autos con compartimentos ocultos para el transporte de la droga.
Para el transporte internacional, la organización contaba con otras fincas en Talavera de la Reina (Toledo) donde se recibía y enviaba la maquinaria industrial, con la cocaína oculta, con rumbo a Italia. El pasado mes de septiembre se detectó un primer envío de cocaína hacia suelo italiano a través de un capo de la camorra napolitana perteneciente al clan Amato-Pagano.
El encargado de dar soporte en España a toda la estructura de introducción, almacenamiento y distribución del producto era un empresario español responsable de la logística del entramado, a través de varias sociedades mercantiles de su propiedad. De esta forma, además de proporcionar logística, permitía introducir en el flujo legal las ganancias económicas obtenidas.
La fase operativa de la investigación se llevó a cabo en dos partes: una, dirigida a las detenciones del núcleo de operaciones, y otra, contra los puntos clave de distribución en las provincias de Valencia y País Vasco.
En total se arrestaron en Madrid, Ávila, Bilbao, Valencia y Toledo a un total de 20 personas, de las cuales 15 ya están en prisión provisional, entre ellos dos objetivos prioritarios de la DEA desde hace años.
AM.MX/fm
