martes, enero 28, 2025

PÍLDORAS DEL LENGUAJE

Por Pedro Camacho

A fuerza de escuchar reiteradamente expresiones incorrectas y equívocas, no pocas de esas frases son empleadas con singular naturalidad. Como cuando alguien habla de sus “planes para el futuro”, como si pudiese hacer planes que no fueran para llevarse a cabo en el futuro. No hay planes para el pasado, por razones obvias, ni para el presente, porque el momento que vive cada “planeador” no lo permite si no es, al menos, para el momento siguiente… ¡Y eso ya es futuro!

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