Por Pedro Camacho
En ciertos círculos sociales, principalmente de bajo nivel cultural, se suele pronunciar, e incluso escribir, la conjugación de verbos como leer y creer con una tilde en la segunda “e”, como si se tratara de un diptongo. Así, esa gente suele decir que alguien “leé un libro” o que un objeto “se caé de la mesa”. Esa pronunciación es aberrante y más lo es tal grafía. Se dice (y se escribe) “lee un libro” y también “se cae de la mesa”, con acento (pero sin tilde) en la primera e.