CIUDAD DEL VATICANO.- En su primer mensaje al mundo el Papa León XVI ha ido más allá de lo espiritual, pues, consciente de los tiempos que vivimos, ha hecho una predicción que ha alarmado el Vaticano, pero que tiene mucho qué ver con las innovaciones tecnológicas.
En una reunión con los cardenales en el Vaticano, el nuevoPapa León XIV explicó que su nombre es un homenaje a León XIII, autor de la encíclica Rerum novarum, un texto clave que defendió los derechos de los trabajadores en plena revolución industrial.
Hoy, León XIV percibe un nuevo momento crucial para la humanidad: el avance imparable de la inteligencia artificial, advirtiendo que “la humanidad corre peligro” frente estas innovaciones tecnológicas.
El Papa no cayó en el alarmismo, sino en un llamado a la conciencia. Considera que, al igual que hace más de un siglo, la Iglesia debe ofrecer su doctrina social como guía ética para un mundo en transformación. El desarrollo tecnológico no es, para él, un enemigo, pero sí una fuerza que necesita dirección y humanidad.
Su elección del nombre no fue casualidad. Tal como lo señaló el portavoz vaticano Matteo Bruni, la referencia a los trabajadores y a los desafíos modernos es una clara declaración de intenciones: esta nueva era necesita una brújula moral que oriente los avances tecnológicos hacia el bien común.
Durante una audiencia con periodistas en la Santa Sede, el Papa profundizó en su visión. Aseguró que la comunicación debe ir más allá de la transmisión de datos: debe construir puentes culturales y digitales. En sus palabras, los entornos digitales deben ser espacios de diálogo y no de aislamiento o enfrentamiento.
Al hablar directamente sobre la IA, León XIV subrayó su “inmenso potencial”, pero también advirtió que ese poder necesita “responsabilidad y discernimiento”. La tecnología no debe sustituir al ser humano, sino fortalecer sus capacidades, proteger su dignidad y fomentar el bien colectivo.
Estas declaraciones, tan directas como necesarias, han captado la atención del mundo, posicionando a León XIV como un líder moderno, consciente del momento histórico que vivimos y con una voz dispuesta a intervenir en los grandes debates del siglo XXI.
AM.MX/fm