Pablo Cabañas Díaz.
En vísperas del desafuero del entonces jefe de Gobierno , Andrés Manuel López Obrador, una organización “fantasma” denominada “México en Paz AC”, lanzó una campaña televisiva dirigida contra el hoy presidente de la República, orientada a dar respaldo a su linchamiento legislativo y judicial.
Vale la pena recordar en abril de 2022, el contenido de aquellos panfletos electrónicos anónimos del 2004, cuando era secretario de Gobernación, Santiago Creel. La campaña decía: “Sólo un gobernante culpable le tiene miedo al desafuero. Un gobernante inocente no teme perder el fuero. La ley nos protege a todos. “México en Paz, AC.”
La entidad firmante resultó ser un “fantasma” con presupuesto muy generoso, pero sin presencia en el Registro Público de la Propiedad, ni en la Secretaría de Relaciones Exteriores, como mandata la ley a las asociaciones y sociedades. En su momento, el propio López Obrador señaló que el mensaje “venía de la Secretaría de Gobernación, propiciado por Santiago Creel”. Miguel Concha, entonces presidente del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, suspendió sus contactos con Gobernación en protesta por el uso de ese “organismo no gubernamental” en campañas que, dijeron, “avivan el odio político y abiertamente agreden a personajes públicos”, así como por el “uso faccioso de la ley” por el Ejecutivo federal contra López Obrador.
Creel encargó a la productora Filmmates Grupo PTA la elaboración de los espots en contra de López Obrador, los cuales supuestamente habían sido contratados por una asociación civil llamada México en Paz. Al paso de 17 años, sabemos los espots fueron producidos por Pedro Torres quien era un alto ejecutivo de Televisa- y fue pagada por la dependencia que encabezaba Creel. Golpear, desde la clandestinidad gubernamental, a un adversario político a través de una asociación civil para emitir mensajes gubernamentales disfrazados de posturas ciudadanas.
En entrevista, el seis de agosto de 2004, Creel ante el desafuero expresó:”Que enfrente las cosas con valor, con verdad. Si él cree que es inocente, que lo pruebe y lo demuestre y si no que asuma su responsabilidad como humano y como hombre”. “Lo demás es hacerle al cuento, tratar de crear nubes de humo por todas partes y otra vez, a lavarse las manos, otra vez a echar la culpa a los demás. Que enfrente su situación como hombrecito y se acabó!”
